Hola a todas vosotras, compruebo con tristeza que nos pasa a todas lo mismo.
Cuando experimenté que la madre de mi marido no me quiere, primero me dio mucha pena, ahora no siento más que rabia hacia ella.
Rabia porque
gratuitamente se ha permitido el lujo de ni siquiera aceptarme. No le gusta como soy físicamente, y encima como le planté cara, aunque no la primera vez, me odia a más no poder, porque entre otras cosas he sido la primera persona que se ha atrevido a replicarla. No puedo con ella, es falsa, egoísta, hace terrorismo psicológico, quiere ser el centro de conversación y de todo, se hace la víctima, presume de su dinero, su voz es desagradable, es hortera, como una nueva rica y es tonta perdida, no sabe llevar ni inciar una conversación a no ser que se hable de ella misma.Tampoco tiene sensibilidad.
La suerte que tengo, y en eso más que muchas de vosotras, es que vive a 500 km de mí.
Lo que peor llevo es que delante de mi marido y de todo el mundo, me adora y se hace la buena, cuando estamos solas, es una bruja, si supiérais las cosas que me ha dicho...
Tb. siento una impotencia muy grande porque sabiendo que me odia no lo puedo demostrar y me tengo que tragar su hipocresía. Cómo me gustaría destaparla.
Bueno, me he desahogado. No entiendo nada de la vida, no tenemos ya bastante con los problemas reales que tiene,que una petarda sin corazón egoísta y mala tiene que venir a jodérnosla?
Cuánto lamento hablar así de la madre de mi marido, al fin y al cabo es su madre y una madre para todos es lo más importante de nuestra vida.
Un beso a todas y al toro. Nos ha tocado.
