Hola marujita.
Tu hija tiene que aprender ha hacer las cosas, no por miedo, si no por respeto y porqué se tienen que hacer. El problema es que por lo que cuentas, pasa de hacerlo. Ahora que estás en un momento delicado cambia el grito, por el castigo, sólo cuándo sea necesario. El grito, asusta, estresa y no enseña. El castigo puede ir conduciendo hacía un camino mejor, siempre y cuándo este bien utlizado.
Cuándo no haga lo que le pides, explicale con palabras claras porqué lo tiene que hacer. Dale un tiempo. Repiteselo una segunda vez y preguntale si necesita ayuda, si aún y así no hace caso es cuándo tienes que avisarle de que le estás diciendo que haga una cosa, que ya no van haber más avisos que a la próxima se queda sin .... o se va a la habitación o lo que sea... Primero se enfadará porqué no esta acostumbrada, pero tú le has dado muchas aportunidades y ella en ninguna de ellas a cedido, por lo tanto tu tampoco tienes que cedir.
Un saludo.