Tu dependencia hacia ella, pudo ser la causa.
Puedo llegar a entender a tu chica, y es que a mi me pasa algo similar. No la conozco, así que lo mismo me equivoco y mi historia no tiene nada que ver, pero sí te digo que las consecuencias pintan igual. Diría con casi total seguridad, que tu chica parece no estar muy enamorada de ti. Si se siente frustada por este sentimiento acaba haciéndolo tuyo, y defendiéndose, haciéndote creer que eres tú el que no la quiere. Si de verdad todo lo que dices en tu mensaje es cierto (quiero decir, que tu versión no tiene más puntos de vista) lo mas probable es que alguna situación haya hecho que tu chica dude, se comporte de manera rara y que te culpe a ti de lo que ella es incapaz de admitir. Si ella es incapaz de ver todo lo que haces por recuperarla (me refiero a cuando estabais juntos y la cosa se mantenía medianamente) es que no debe quererte. Es mi opinión, por supuesto, pero confío plenamente en lo que digo, porque yo siento algo similar a lo que tu chica sufre. Yo soy consciente de mi comportamiento y después de meditarlo mucho, se que la culpa es mia, que soy incapaz de quererlo como merece y que esta frustación es la causa de que no nos entendamos. Mi consejo es que lo dejes estar. Quizás cuando haya pasado suficiente tiempo ella se aclare y hable contigo. Quizás se refuerza en su decisón. Sea como sea, no puedes, no debes, querer que una persona que no te corresponda continue, porque al final, sera peor, mas doloroso. No puedes obligar a nadie. Las reconquistas no sirven cuando una de las partes no tiene voluntad, porque tus esfuerzos serán en valde. Además, y ya acabo, poco a poco acabarás adaptándote a la nueva situación, y esto no es opcional, es así de simple. El tiempo es el único que podrá aliviarte, pero tienes que empezar a plantarte la vida sin ella, es la única forma de que no duela tanto.
Un consejo: no hagas que tu vida dependa de otra. Es tu peor error. Incluso tu novia podría haberlo sentido y eso que al principio resulta encantador, acaba convirtiendose en una carga para la otra persona. Suerte y mucho ánimo.
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