Tengo dos consejos contrarios.
El primero es que deben tener independencia, cada uno. Independencia de criterio, independencia económica, de decisión, de metas y planes para la vida. Puedes apoyarlo pero no decidir por él. Así mismo no debes detener tu vida por alguien que no se decide.
El otro es que debes conquistar también a su familia. Idealmente permitiendo que te conozcan, desde luego intentamos mostrar lo mejor de uno. Lo que más ayudaría sería que lo vieran a él feliz y motivado para conseguir sus sueños. ¿Será posible que estés más decidida a luchar que a hacer las paces?
Si son jóvenes, estudiantes o recién graduados es probable que su familia desee que consiga ciertas metas antes de complicar su vida con una relación seria.
Por último, aplica para toda situación en la vida, esto no es culpa o responsabilidad del otro (de la tercera). Sí, pueden hacer algo pero hasta ahí llegan y, a partir de ese punto, tú eres responsable de lo que haces con lo que haya sucedido.