Hola! yo soy miembro del foro y alguna vez he dado consejos, hoy pido uno. Estoy separada de mi esposo hace casi 6 meses y viendo que el no piensa tramitar el divorcio lo haré yo el próximo mes. Fue un error este matrimonio, yo me casé con un hijo de mamá, absolutamente dependiente emocionalmente hablando, un ser que no jamás aprendió a tomar decisiones. Analizando las cosas, creo que se casó para según él, tener absoluta libertad de tener relaciones conmigo en el momento en que se le diera la gana, y porque de una u otra forma yo me considero una persona con mucha fortaleza espiritual y ahora tengo la certeza de que él se aprovechó de eso. Tuvimos casi 4 años de noviazgo. Cuando decidimos casarnos, lo comunicamos a su familia con un año de anticipación, debido a que yo quería casarme en mi tierra natal. Así lo acordamos. Tres meses antes de la fecha, me dice que no se puede porque su familia no tiene como pagar el viaje (ese año, su padres viajaron fuera, estando casi 2 meses en el exterior) su hermana (a quien detesto, pues fue uno de los artífices de todo) se compró un carro nuevo, etc. Y ellos (como él era el sostén de la casa) querían que el pagara todo. Fueron momentos terribles, ellos inventaron que por causa de mis padres los planes se habían cambiado y otra serie de estupideces propias de personas ignorantes. Finalmente, contra viento y marea nos casamos. No pudieron ir y meterse en mi casa, porque no lo permití y delimité muy bien mi territorio. Pero empezaron los dizque problemas de salud de mi casi ex, (perdonen, pero es que para mí ya no es mi esposo), y que si se sentía mal, que el corazón, que la acidez, etc. Y cada vez que algo ocurría, llamaba a su papito del alma, para que lo ayudara. Finalmente, un día yo estaba conversando con él y le dije que ya no quería seguir en mi actual trabajo por muchas razones. El me sale diciendo que él también va a renunciar y corrió a hacerlo, dejandome en este trabajo que no me gusta, sembrada. Luego de eso, estuvo año y medio sin trabajar, porque nada le gustaba. Que si en un lugar pagaban muy poco, que si el otro no estaba a la altura de sus conocimientos (el tiene un título profesional normal, nada mas), etc. Se fue al extranjero a trabajar, se iba a quedar 6 meses, solo se quedó dos, porque su salud, se complicó (según él). En fin. Me harté y poco a poco me fui alejando emocinalmente de él. Creo que ni cuenta se dió, su enojo vino cuando me negué a tener sexo con él. Eso fue lo que puso furioso (por eso hoy creo que todo su interés se reducía a eso). Luego de un tiempo (debo mencionar que siempre, le pedí a Dios que me indicara la mejor forma de hacer las cosas) me entró una intranquilidad tal, que decidí mudarme de casa ese fin de semana. El día antes de la mudanza, como jamás lo había hecho, reviso el celular y encuentro unos mensajes enviados a dos chicas. No dije nada, sino hasta el día siguiente cuando ya me había cambiado de casa y me sentía segura. Lo negó y se fué. Luego de eso, lo he visto como 5 veces, su familia poco menos que me carga en brazos, pero yo sigo firme y ya decidí. Con su hermana no me dirijo la palabra desde que ella una noche me agredió en público y él se hizo el que no había escuchado nada y cuando llegamos a la casa y le exigí que me defendiera, el lo que hizo fue irse a dormir a casa de sus papás. En fin. No lo odio, pero tampoco quiero mayor trato con él. Sin embargo, me siento muy triste, desprotegida, sola (vivo con una hermana que enviudó hace un año) y que está sumida en su dolor. Como su esposo y mi ex eran primos, la familia en común es la misma y veo que ella se ha puesto como alfombra de todos ellos. Me siento muy triste y regresar a mi país, significa volver a casa, con unos padres que quiero mucho pero que nunca han sido apoyo para nadie, por el contrario, gracias a ellos, las 3 hermanas (no tuve hermanos) conocimos muy temprano lo que el sufrimiento significa. Y a eso debo agregar que ya no quiero este trabajo, porque es una esclavitud en pleno siglo XXI. Acepto sus consejos y los agradezco de antemano.
