Llevo más de 10 años de matrimonio y un hijo pequeño. Nuestra relación nunca ha sido fácil, principalmente por su familia YYYY su falta de caracter.
Desde casi el principio mi bruja, perdon mi suegra , me ha tradado mal siempre que ha podido... Todo bastante sutil, no llegaba a ser muy exagerado... me arrinconaba, quedaba con mi marido siempre sin estar yo delante... nunca ha llamado a casa, lo llamaba al trabajo... le lloraba sobre lo poco que lo veia... cosas así. Aprovechaba la mínima ocasion para decirme que había engordado, que me veia mayor... que se yo, millones de lindezas.
Decir que no íbamos a una reunión familiar, porque teníamos otros planes, era un drama... porque claro, ellos no pueden cambiar día y hora. Sin embargo, cuando nosotros les proponemos quedar para un cumpleaños, si yo le digo a mi marido "quedamos con ellos sábado por la tarde" La respuesta es " a ver, a ver si les va bien" .... Los llama uno por uno y si a alguno no le va bien (no es que no puedan venir por trabajo, tienen otros planes) pues no pasa nada... se cambia. Ellos no pueden cambiar nunca un evento... Si mi cumpleaños coincide, que coincide, con el de otro familiar, el mío es secundario, primero se queda con ellos para celebrarlo. A todo esto y durante tantos años... mi marido me viene a decir, en resumen, dando muchas explicaciones y diciendo lo mal que se siente, porque no me llevo bien con algunos de ellos, que es lo que hay... que me toca callar... y lo mal que se siente porque no nos llevemos genial... cuando no soy yo la uqe he empezado esta situación. Su madre es una celosa patológica...
Y podeis imaginar que desde que nació mi hijo todo ha empeorado exponencialmente... sus celos se han convertido en patológicos... pero ella, no es lo que me duele... me duele que mi marido ponga siempre por delante los deseos de su familia... que le duela que su madre quiera vernos cada día y no sea así y NO que su madre me gire la cara, me menosprecie... ESO AL PARECER NO ES DOLOROSO para él, ni importante.
Es terrible... he llorado y sufrido mucho... pero lo peor es que ahora soy yo la que no quiere vivir así, me he quemado, cada año un poquito más... y veo a mi marido como a un extraño... o quizas antes lo veia como no era... Estoy muy muy triste y terriblemente preocupada por mi hijo.