Hola pamadys
Creo que te encuentras en un momento de tu vida en el que puedes tomar dos caminos diferentes sin mucho problema.
Ya aprendiste que no se puede vivir con alguien en quien no se puede confiar y tampoco puedes vivir desconfiando de alguien.
Me refiero a que no puedes vivir con alguien que tiene otras relaciones amorosas aunque éstas no llegen a contacto físico, pues es cierto tipo de infidelidad. Tampoco puedes vivir como neurótica celosa.
Ya lo aprendiste. Ahora que lo sabes y lo viviste puedes hacer dos cosas: terminar y buscar un hombre en el que puedas confiar o regresar con ese exnovio y ahora no ser una -novia psicópata-.
Por lo que dices parece que ésta última vez que terminaron fue por tu culpa. Pero en lugar de ver que te tienes que arrepentir, me parece que tienes coraje con él, porque él te hizo así y no te supo soportar. Dices: "me dijo que ya no podia mas que solo peleabamos............. me dolio porque no le importo nada de lo que yo he perdonado" (el acento suele estar a un lado de la Ñ o de la P).
O sea, quieres que, en atención a lo que tú le perdonaste primero, él se aguante lo que haces ahora. Tú dijiste que él cambió mucho cuando lo descubriste, ¿pero tú no quieres cambiar? o a caso vas a decir que no puedes? (como si te hubiera -creado- así, como el doctor Frankenstein).
Si no puedes, entonces termina esa relación y empieza otra. Si ese otro hombre hace cosas que te generan desconfianza, como no puedes controlarte, termina esa relación también, y así sucesivamente hasta que adquieras la capacidad de no ser insoportablemente celosa o bien, ya nadie quiera ser tu novio y ya no tengas ese problema.
Otra opción, si crees que sí puedas volver a confiar en tu actual exnovio, entonces debes buscarlo y decirle que te perdone por querer hacerlo pagar, aun después de saber que ya cambió (o sea, de no haberlo perdonado en realidad). Y luego dile que, si te da otra oportunidad, no volverás a dejarte llevar por tus sentimientos de inseguridad.
Si acepta, ¡Felicidades! No lo eches a perder... Si no quiere, ni modo. Así es la vida a veces.
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