Veo la relación familiar deteriorada. Veo difícil solución, la verdad. Tu marido, ¿de qué lado está?, ¿te apoya?. Puedes hablarlo con un@ psicólog@, quizá la pongas más en contra tuyo. Tú eres "la mala", querida.
Ya habéis empezado a obedecer lo que la adolescente os pide. Ni os lo agradece, ni ve el esfuerzo, ni te respeta al 70%. Esa edad es muy difícil, quizá esté sufriendo por sus propios problemas, si también le añades tener que acoplarse al nuevo hogar de su padre con su joven esposa ...
Yo la dejaría a su aire. No la hablaría si ella no lo pide, seguiría haciendo mis cosas sin contar con ella, la ignoraría un poco para que pruebe de su medicina. No entres al trapo con sus ataques, ignórala. Aprende a que no te afecte anímicamente su actitud.
De vez en cuando, con tacto, le puedes comentar a tu marido, a solas, lo poco que ayuda en casa. Ésto lo decides tú, sin chinchar, para que se vaya dando cuenta de su negatividad. Yo no lo haría, en fin ... Soy, de buena, tonta.
Sobre todo, procura seguir haciendo tu vida con tu marido y no pelearos por su hija. Es como con los suegros, cuanto más se remueve la mierda, más huele. Él se pondrá del lado de su niña, no lo dudes.
Un niño sabe cómo hacer para que su padre discuta. Los hijos, los padres y los hermanos son los causantes de muchos divorcios.
Es duro, yo lo hice así. Quizá, con mucho tiempo, se dé cuenta del daño que está haciendo o siga igual. Entonces, podréis hablarlo, abiertamente, sin reproches, sin descartar la ayuda de un terapeúta. Sois familia.
Suerte.