Soy la mayor de varios hermanos y he crecido toda mi vida convencida de que mi madre no me quiere porque soy una mala hija.
Hecho la vista atrás y no consigo recordar un solo gesto de afecto o Cariño por su parte. Mi madre jamás me dio un beso y nunca me dijo que me quería. Atendió mis necesidades proporcionándome cuidados y educación, pero nuca sentí que mi madre me quisiera. Al contrario que a mis hermanos. Mi madre y mi hermana son uña y carne y mi madre ha pasado la vida comparándome con ella, motivo por el cual nos llevamos mal. Mi hermana, un ser bastante obscuro, siempre se aprovechó de esa situación preferente en casa, motivo por el cual he sufrido mucho y he llegado a recibir hasta agresiones físicas por parte de mi padre y también de mi madre.
Miro atrás y me veo a mi misma, pequeña, llorar, reclamando su atención y veo su cara de odio al decirme “es asqueroso verte llorar”, una y mil veces. Después, “eres tonta del culo” y luego siguió el “eres igual que tu padre”. Y así crecí, buscado cariño en mis amigos y en sus familias, mientras mi madre me echaba en cara que solo me importaban mis amigos y que no quería estar con ella, al contrario que mi hermana, de la cual no se separaba, y siempre le hacía compañía. Lo cierto es que yo rehuía esos momentos con ellas, donde me sentía fuera de su relación y solo recibía desprecios y dolor. Y así crecí en un entorno donde mi hermana tenía de todo y yo tenía que trabajar para tenerlo. Hasta hace muy poco he pensado siempre que la falta de cariño y las diferencias de trato de mi madre con respecto a mi era culpa mía, pues soy un ser bastante difícil de querer.
Pero sucede que la vida ha ido pasando, y soy una persona exitosa, con muchos amigos y además me esfuerzo por ayudar en mi entorno y bastante comprometida socialmente. Poco a poco me he ido dando cuenta de que las únicas personas que me desprecian en este mundo son mi madre y mi hermana. Y empecé a pensar que tal vez la culpa no fuera del todo mia.
Ella jamás mostró el más mínimo gesto de preocupación por mis problemas, nunca ningún tipo de afecto, jamás me ofreció su ayuda y no recuerdo un solo día en el que me haya preguntado cómo estoy.
Si yo no llamo, ella no llama jamás, puede estar semanas sin saber de mi, ni de mis hijos, por los cuales no pregunta y olvida hasta la fecha de sus cumpleaños. Es posible que en los últimos 10 años haya marcado mi teléfono menos de 10 veces.
La cuestion es, llegados a este punto, ya que he asumido lo que pasa, ya que no le sorprende su indiferencia, ya que no espero por su parte absolutamente nada, ya no puedo soportar más dolor.
Me pregunto Como puede un ser humano aceptar que su madre no le quiere, y seguir viviendo sin dolor?
