Hola. Quería contar mis problemillas en pareja por me gustaría conocer vuestro punto de vista. Intentaré ser breve.
Conocí a mi novia en el extranjero y llevo 5 años con ella. Ella es del norte y yo del sur, pero vivimos juntos hace tres años en Madrid. Estos cinco años los cuento como los más maravillosos de mi vida. Desde que la conocí ella soñaba con ir a trabajar a Londres (un año y medio desde este mes) y lo ha conseguido.
En algunos momentos hemos tenido alguna discusión, sobre todo porque ella se quejaba de que yo no me preocupaba por sus cosas, y alguna diferencia de la vida cotidiana como no gustarme ver la tele todo el día.
El caso es que este verano ha sido bonito para mí, yo creo que para ella también, pero llegamos a discutir en algún momento.
El problema empezó la semana pasada. Ella ya estaba en Londres y me dijo por teléfono que no me echaba de menos, que está echa un lío con sus sentimientos y no sabe si soy la persona con la quiere estar el resto de su vida. Que sólo se acuerda de lo malo. El fin de semana pasado yo iba a Londres, y escenificó lo que me adelantó por teléfono.
Mi respuesta fue de perplejidad lacrimógena las primeras horas, pero desde el sábado capté lo que quería y mantuve las distancias, dejando que fuese ella quien se acercarse a mí para hablar, cogerme de la mano, etc... e incluso por la noche opté por intentar pasarlo bien y me lo pasé especialmente bien con ella y sus compañías. El domingo me volqué ayudándola en su quehacer, y vamos, me porté como un caballero (creo que normalmente lo hago). Al despedirnos, me dio las gracias por "haberme entendido". Por otra parte, la posibilidad de un chico en su cabeza está descartada.
A la vuelta, la verdad es que le he estado dando muchas vueltas. La tengo presente casi todo el día y ella no tiene claros sus sentimientos. A esto hay que sumarle la traumática separación de sus padres aún no concluida. A veces pienso que está cortocircuitada, pero la incertidumbre de no saber si volveré a estar con ella es muy grande. Ayer, tres días después, me llamó para "ver qué tal estaba". Estuvimos hablando como si nada, tuvimos una conversación cordial pero nada más.
He tomado la determinación de darle lo que me pide, tiempo. Que sea ella quien me llame a mí, no presionarla ni reprocharle nada (es legítimo que me deje si al final quiere dejarme).
En cuanto a mí, estoy razonablemente bien. Como bien, duermo bien, hago mi trabajo, llevo una vida social normal y me río como antes. Contemplo la posibilidad de la ruptura, y que hay vida después, pero quiero seguir con ella, quiero reconquistarla.
Agradecería conocer vuestro punto de vista y algún consejo para mi propósito.
Muchas gracias.
Un abrazo.
