Hola chicas, cómo están?
Les quiero comentar mi última experiencia con un hombre que me ha dejado con muchas dudas... porque no llego a entender a los hombre nunca. Nos conocimos en el ambiente de Facultad, el era docente de allí. Yo alumna aunque todavía no había pasado por ese instituto. El tiene 35 y yo 31. El separado, sin hijos. Venía de un desengaño amoroso, pero parecía dispuesto a salir adelante. Yo, soltera, por el poco tiempo dedicado a hacer sociales entre el trabajo y estudio, no me daba mucho tiempo para salir. Lo hacía igual muy de vez en cuando. La cuestión es que se dió la oportunidad de salir con el, gracias a una invitación suya. El primer mes el estaba super entusiasmado, incluso yo llegué a colocar un freno, porque me parecía mentira que estuviera tan bien conmigo. Pero al mes su ex marcó presencia luego de unos cuantos meses para retirar sus cosas de la casa. Todo parecía indicar que ella estaba nuevamente en pareja, incluso antes de romper con él. Eso lo deprimió bastante. Repuntó con el tiempo y llegó el momento del divorcio pocos meses después. Otra caída para el... En ese momento yo intenté separarme de él porque creía que no debía pasar por eso. A lo que el accedió, pero el mismo día me pidió que me quedara con el, pues sentía que dejarme ir era desaprovechar una gran oportunidad.
Pasaron los meses, y la verdad es que todo fué de maravilla. Hasta que comencé a notar que empezó a decaer su entusiasmo. No sentía su amor. No quería estar así por lo que nuevamente intenté dejarlo. Pero el volvió a buscarme. A los días conocí a su familia... pero noté que el tenía un gran distanciamiento para con ellos, principalmente con su madre. Era como un rechazo. Ya conocía a sus amigos también.
En todos esos meses el no estaba muy bien con su trabajo. Hablaba mal de todo el mundo, siempre negativo con todo. Yo lo bajaba a tierra aconsejándolo. Continuamos muy bien, dos meses más y hasta planificamos un viaje, el propuso el lugar y yo me encargué de lo demás. Pero antes del viaje nuevamente tuvimos otras dos discusiones donde yo intenté dejarlo. Pero la segunda de estas, el no volvió a buscarme, yo volví, arrepentida, porque realmente quería hacer ese viaje con él. Ese viaje estuvo divino... pasamos genial!
Pero al volver nuevamente un intento de separación de mi parte al verlo realmente distante, desinteresado y enfocado en su trabajo y amigos totalmente. Pasaron poco menos de 10 días y yo volví pidiéndole perdón. Pero el ya no era el mismo. Al pasar los días siguió igual, de distante, ya no me escribía, no me llamaba. En una de las charlas me comentó que se iba de viaje por temas laborales por unos días. Perfecto! No escribíamos en esos días, poco, pero algo era algo. También me contó que se iba más adelante cerca de mi cumpleaños también a otro lugar por unas semanas. Pero no me cayó bien, pues rondando mi cumpleaños, podía ser que no estuviera conmigo ese día.
Al volver de su viaje me dijo que pasaba a verme por el trabajo, y ahí me dijo que creía que quería estar solo. Que me tenía un gracias muy grande por todo lo que había hecho por el, pero que no me quería retener más, que me deseaba lo mejor, que lo había intentado pero que ya no aguantaba más... Que si me había querido mucho, que me había valorado mucho, pero que de repente no me había amado. No le dije nada... y me fuí.
Días después le dió mis cosas a una amiga que ni siquiera sabía que estábamos en pareja. Le escribí un mensaje diciéndole que me parecía absolutamente innecesario que le diera mis cosas a otro si es que habíamos terminado tan bien. Y me contestó que quería evitar un momento incómodo y que al menos si el quería que terminara todo bien pero que lo disculpara si me había molestado.
Al día de hoy no se que pensar... si va a volver, o no... si yo hice algo que lo molestara, si me quiso o no me quiso. Descarto la posibilidad de que esté con otra... pero fué tan de golpe todo que me desconcertó. Y su última reacción fué muy inmadura, que me extraña de el.