Hola, escribo para desahograme, pues ya no puedo más. Mi marido creció en una familia con pocos recursos, y tuvo que labrarse su camino, estudió como pudo y lo poco que pudo, vivió en una vivienda humilde, con lo que había, pero en lo que podía ser más rico que nadie, con el amor de su familia nunca contó. Apenas vivió navidades, nunca conoció al ratoncito pérez, su hermana no quiso jugar con él, su padre no le acarició, nunca le acompañaron en su primer día de cole... nunca vivió una infancia de verdad. Pero se hizo mayor, creció y gracias a su esfuerzo prosperó en la vida, se hizo fuerte y estudió. Su familia, mis suegros, se aprovecharon de él, le chuparon hasta el último céntimo de lo que ganaba. Nunca pudo ahorrar, nunca pudo darse un capricho, ni siquiera cuando él ganaba para él, porque nunca le enseñaron nada más en la vida, sólo que debía dar en casa. Así pagó la segunda vivienda de mis suegros, los estudios de su hermana, les prestó dinero...
Y el día de nuestra boda, hace dos meses, y después de estar un año diciendo que no querían saber nada, dicen que no quisimos contar con ellos para organizar, que la comida sabia mal, que las copas olian mal, que todo era una mierda.
Y esta primera navidad, la pasamos con mi familia, porque ella no quiere invitarnos, y la excusa es que ella lo que quiere es ir a comer fuera sin gastar, y como nosotros no los invitamos a nuestra casa, su hijo es un tacaño ¡después de todo lo que les dió!, jolín, que la primera vez que comió un filete de ternera tenía 25 años, y su madre comprándose lavavajillas...
Mostrar más