No sé qué sucede.

Estoy pasando por un proceso emocional ciertamente difícil y ha sido un tormento poder sobrellevarlo. Esto que voy a contar son los síntomas de lo que ocurrió ayer en casa, no sé si lo que sucedió tenga algo que ver con mi proceso emocional.

Ayer por la tarde me encontraba haciendo los quehaceres domésticos. No había nadie en casa y yo trataba de ocupar mi mente en algo más que estar reviviendo el pasado con mi ex pareja y todas las cosas tristes que eso conlleva y de pronto estaba fuera de órbita, yo parecía flotar, y alejada de mi cuerpo. Y el entorno se volvió triste, mi voz al hablarme a mi misma era lejana y todo era diferente, me inundo un terror profundo, no sabía qué era real y qué no. Y le pedí a los Dioses llorando que me cuidaran porque el único halito que había ahí era de oscuridad y de pena, llorando tomé el teléfono y llamé, la voz que atravesó fue la de mi madre preguntando qué me sucedía y le respondí que estaba asustada, no hablé más que esas palabras y colgué. Quería separar el mundo real del mundo irreal, no sabía si estaba viva o muerta y en ese momentos los temores de mi corazón se volvieron reales, todo se tornó gris y yo parecía un autómata. Me senté y recé, me preguntaba si estaba volviendome loca, y tenía miedo de mi estado y de lo que pudiera pasar de forma involuntaria. Llore por un lapso largo y traté de hablar conmigo misma, alentandome a calmarme, era como si todo se hubiera paralizado y nada feliz existiera y yo no sabía a dónde pertenecía, el hilo que me sostiene en esta dimensión se había roto. Recibí  una videollamada esta vez y era mi madre tratando de calmarme, yo seguía llorando alterada y con mucho miedo. Empecé a conversar y este miedo se fue apagando, la llamada terminó y yo recordé aquel episodio que describió el pintor alemán Edvard Munch en su obra de "el grito", pensaba que lo que me había ocurrido era similar, el tiempo se había paralizado y toda la tristeza decayó sobre mi, sin saber quien era yo, si era real o no.