Hola!
Mira, creo que no haces mal en ocultarle nada, eso sí, nunca le hables mal de su abuela directamente, porque los chicos, a veces sin querer, pueden abrir la boca en momentos inoportunos y eso te puede jugar en contra.
Yo tuve una experiencia similar cuando era niña, en mi caso mi madre era la que estaba harta de mi tía (no tenía suegra ya que mi padre le llavaba casi 20 años, pero sí tenía cuñada muy muy anticuada y metida). Mi tía se metía en todo y siempre andaba con indirectas de que si la casa tenía un poco de polvillo, de que sus comidas eran las mejores, de que sus otros sobrinos eran sus preferidos (mi hermano y yo siempre estabamos "discriminados" por esta señora), y bla bla bla...
Cuando mi padre enfermó gravemente, vino a instalarse en casa (junto con su hija, otra arpía) y quería organizarnos la vida y además luego por la espalda nos criticaba, decía que no hacíamos nada por mi padre, cuando hicimos todo lo que estuvo a nuestro alcance para ayudarlo. Al fallecer mi padre, fue la oportunidad de mi madre de deshacerse de ella y de su hija, por lo que la relación se rompió. Algo que ayudó también era que vivían a 1.000 km, así que tampoco había oportunidad de cruzarlas por la calle...
A lo que voy, mi madre jamás me habló mal de mi tía, nunca me dijo "tu tía esto o aquello", pero sí que se quejaba de ella con sus amigas, y yo todo eso lo escuchaba y además veía como mi madre sufría o se molestaba con sus comentarios. Cuando crecí y tuve más capacidad de razonar, vi realmente cómo eran las cosas y me di cuenta de cómo era mi tía, y la verdad es que no la soportaba porque siempre me pareció una mala persona. Cuando me enteré que se murió, la verdad es que no me produjo absolutamente nada, no derramé ni una lágrima ni tampoco sentí lástima. Puede que suene feo, pero es así. Así que, paciencia, que todo llega, y a tu suegra ya le tocará pagar con la indiferencia de su nieta lo que te está haciendo sufrir a ti ahora.
Un beso.