En respuesta a xufen_6926193
Desde luego, ellas tienen mucho que ver
Yo pienso que desde muy pequeños, ya desde la cuna, les hacen sentirse totalmente dependientes de ellas.
Por ejemplo, cuando pasé a mi hijo mayor de la teta al biberón, porque me reincorporé a mi trabajo, no tuve ningún problema. Sin embargo a ella le faltó tiempo para contarme que su hijo-mi marido- lo pasó realmente mal en su momento cuando ella hizo lo mismo (no porque se reincorporara al trabajo, porque en su vida ha dado golpe, sino porque el niño ya tenía un montón de dientes), me dijo que tenía que tapar el biberón con un trapo y simular que era su teta, porque sino el niño no quería tomarse la leche.... eso fue el principio de todo pienso yo.
Luego les acosan a preguntas, desde muy pequeñitos, quieren saberlo todos de sus amiguitos, de sus familias, para tenerlo todo controlado. Cuando empiezan a salir en pandilla, más de lo mismo ¿de dónde vienes ? ¿a dónde vas? ¿y por qué? ¿me vas a dejar sola? . Cuando éramos novios, las veces que llamaba yo a su casa para quedar, me preguntaba siempre ¿de parte de quién? yo era -y sigo siendo después de 16 años- una intrusa que le estaba tocando las pelotas.
Las hay que se hacen las doncellas indefensas, que necesitan el apoyo constante de un hombre para todo. Mi suegra se quedó viuda a los 70 años, pero mucho antes mi marido ya era el hombre de la casa, porque mi suegro no estaba muy por la labor.... Por eso mi marido, incluso después de casado y de ser padre, continuaba sintiéndose tremendamente responsable de lo que hacían y dejaban de hacer sus padres, porque desde niño le inculcaron que ÉL era el responsable del bienestar de esa familia.
Por eso cuando aparecemos nosotras a la que se dan cuenta que la relación va en serio empiezan los problemas, porque ven peligrar la relación tan dependiente que tienen con sus hijitos.
Cualquier psicólogo te lo explicaría largo y tendido, nuestros maridos tienen una relación de dependencia super-fuerte con su familia de origen, y sólo unos pocos privilegiados pueden superar eso, es prácticamente imposible.
En mi caso, intento no pensar en ello, mi única vía de escape es este foro y confieso que también voy al psicólogo -no sólo por este tema, claro, pero también ha salido-, me produce un sentimiento de impotencia tremendo el ver cómo se siente tan en deuda con ellos, cuando en realidad nunca han hecho nada por él, en cuanto puso los pies en el instituto ya tuvo que empezar a trabajar porque se negaron a pagarle los libros. De niño nunca le llevaron ni a tomar una coca-cola por ahí, no digamos al cine o de vacaciones, todo lo que costaba dinero quedaba automáticamente descartado. Suerte tuvo de sus tíos que no tenían hijos y gracias a ellos pudo darse algún capricho infantil. Pero no se puede hablar del tema, es absolutamente tabú.
La hermana de mi marido tiene el mismo problema, siempre está contando maravillas de sus padres, cuando a ella también la pusieron a trabajar de adolescente, para no tener que pagarle nada, ella contaba super orgullosa-hace años- que no entendía por qué los jóvenes no se ponían todos a trabajar a los 16 para ayudar a sus padres, decía que esos tenían mucha jeta. Pues ahora su hija está ya en la universidad y os aseguro que sólo se dedica a estudiar y jamás ha trabajado, ni siquiera en verano ¿qué curioso, verdad?
Para hartita y todas las demás
Te entiendo mucho, el caso de mi marido es el contrario, pues le dieron todo lo que quiso con lo cual se siente tan tan agradecido. Que te puedes imaginar, se desvive por ellos.
Yo antes era su novia y después de casarme la novia pasó a ser mamá y papá.
Antes deseaba estar conmigo, ahora está deseando ver y llamar a mamá continuamente.
Cuando era novia me sentía orgullosa porque me llamaba mi novio todos los días y resulta que meses después me entero que hacía lo mismo con su mamá, así que supe que ya no era tan especial
¿Notasteis esa anormalidad antes de casaros? Y que luego el problema se multiplicó por 10 al casarnos. Que tontas fuimos, ¿verdad?
