Precisamente esa canción escuchaba ( de diego Torres ) cuando me decidí a escribir nuevamente aquí, y digo nuevamente por que ya lo hice hace un tiempo por que al igual que los que escribis aquí yo también necesité expresar lo que sentía ese dolor que embriagaba mi alma, realmente me ayudó en su momento, pero esa es una historia que ahora ya no importa.
Realmente no sé que quiero deciros a todas y cada una de las personas que aquí os encontrais, pero sentí una necesidad imperiosa de deciros que entiendo cuanto sufris, que sé que por algunos o por muchos momentos creeis desesperar de pena, de rabia o de lo que sea, que sentis que el dolor por esa perdida nunca se irá por que el corazón duele mucho demasiado y bueno que os voy a contar yo ya que vosotros/as no sepais.
Quizás me gustaría abrir aquí, donde tanto expuse sobre mi y mi dolor una puerta de ESPERANZA, por que os sigo leyendo aunque ya no exponga lo que escribo y lo guarde para mi, nunca he olvidado todas las palabras de aliento, comprensión y respeto que aquí encontré cuando lo necesitaba, por eso después de lo sufrido, lo vivido, lo luchado sé, como por mi tierra se dice de buena tinta, que es posible volver a sonreir, a estar alegre, a tener proyectos nuevos, ilusiones, esperanzas, A VIVIR, que quizás dependiendo del tiempo que haga que habeis perdido a esa persona querida no podais ni asimilar lo que os digo (es normal), el dolor pesa mucho, aunque en verdad que se puede, aunque eso si, sin prisas y sin apuros se llega a la meta deseada.
Aquí estaré en mi anonimato pero con todos/as vosotros/as para daros el apoyo, el aliento, el abrazo, la caricia, el beso que necesiteis.
No os rindais nunca de LUCHAR por ser felices.
Y ahora me gustaría algo que...
Imagineis que esa persona que habeis perdido pudiese hablaros y deciros como le gustaría que estuvieseis después de su ausencia en vuestras vidas, seguro que sufriendo no. Bueno pues eso hice yo un dia imaginé que me hablaba, imaginé como lo haría al verme sufriendo y padeciendo su ausencia y pensé y pensé y escribí algo como esto:
No llores por mi ausencia...
Alégrate por todo lo que amamos y vivimos juntos.
No me busques entre los muertos, donde nunca estuvimos...
encuéntrame en todas aquellas cosas que no habrían existido
si tú y yo no nos hubiésemos encontrado.
Yo estaré a tu lado, sin duda alguna,
en todo lo que juntos hemos creado,
en el sudor compartido, en el trabajo,
en las lágrimas que intercambiamos y
en todas aquellas personas que pasaron a nuestro lado
y que, irremediablemente recibieron algo de nosotros
y llevan incorporado - sin notarlo - algo de Tí y algo de Mí.
También nuestros fracasos, nuestra indolencia y nuestros pecados
serán testigos de que estuvimos vivos y no fuimos ángeles,
sino humanos.
No te ates a los recuerdos ni a los objetos,
porque donde quiera que mires que hayamos estado,
con quien quiera que hables que nos conociese, allí habrá algo mío.
Todo sería distinto si no hubiéramos aceptado vivir juntos durante tantos años... El mundo estará ya siempre salpicado de nosotros.
No llores mi ausencia, porque sólo te faltará mi palabra nueva y mi calor.
Estoy contigo.
Llora si necesitas hacerlo, porque el cuerpo se llena de lágrimas ante todo lo que no es capaz de comprender, pero que entiende como algo grandioso... Y ya sólo lo pueden expresar los ojos.
Y Vive, vive creando cada día y más que antes,
porque yo estoy seguro que desde mi otra presencia
yo estaré junto a ti y en ese acto nos habremos encontrado.
Y sin entenderlo muy bien...
Así, estaré como los granos de trigo que no entienden que su compañero
muerto en el campo ha dado vida a muchos nuevos compañeros.
Así, con esa esperanza, debes continuar dejando nuestra huella.
Tu muerte nos volverá a dar la misma voz
y nuestro próximo abrazo nos incorporará
ya sin ruptura a la Única Creación.
Y ya no nos separaremos.
NO OLVIDES QUE TE ESPERO...