Te entiendo
te comprendo, hace muchos años tuve una decepción amorosa que dejó una huella muy marcada en mi ser, me dejó insegura, amargada en ocasiones y fría. Mi esposo, para entonces amigo, empezó a enamorarme poco a poco y abrí mi corazón ante él, le dije todo lo que me había pasado con mi anterior pareja y todo lo que sufrí y que si ayudaba a ser feliz. Ahora tengo 2 hijos, y son muy cariñosos, son niño y niña y me devolvieron ternura a mi vida. A veces, me muestro indiferente, fría de nuevo y sé que estoy mal, pero el aliento de mi esposo, el amor de mis hijos y mi trabajo hacen que eso pase rápido. Tu pareja puede llegar a ser tu mejor amigo y te puede ayudar mucho a salir adelante, a cambiar, pero tienes que hablar con él y compartirle tu historia.