Todo ha ido perfecto. hasta que me ha dicho que me ve como a una amiga.

Os voy a contar una historia que últimamente me está comiendo bastante la cabeza.
Tal vez os parezca una tontería, pero me gustaría que las mujeres que seáis más adultas y con más experiencia me déis vuestra opinión, porque francamente estoy muy perdida y no sé qué ha pasado en mi relación de pareja.

Hace cuatro meses y medio conocí a un chico de 23 años. Ahora mismo yo tengo 19, y vengo escaldada de dos relaciones largas que han terminado bastante mal.

SIn embargo, conocí a este chico un día en una convención de hobbies y me llamó mucho la atención. Fue algo como un flechazo: Él se fijó en mí y yo en él. Nos caímos genial y empezamos a hablar.
Esta convención duró cuatro días. Los cuatro días nos veíamos por la mañana y pasábamos el día juntos. Al tercer día salimos de fiesta por la noche y terminamos liándonos. Los dos sabíamos que iba a pasar y que no íbamos a rechazarnos.

Él es un chico un poco especial. No le gustan los líos, siempre que se ha puesto con una chica ha sido porque de primeras le ha llamado mucho la atención. Al día siguiente, cuando nos despedimos en el final de esa convención, me abrazó y me dijo que me había cogido mucho cariño. Nos dimos los MSNs y empezamos a hablar. Esa misma noche me dijo que le había gustado mucho y que quería probar algo serio conmigo.

De esta manera empezamos a salir. Nuestra relación ha durado cuatro meses, y ha sido muy intensa.

Cuando empezamos no sabíamos cómo iban a ir las cosas, él estaba un poco asustado porque es un chico muy inseguro y que siempre tiene dudas, pero nuestros carácteres eran realmente compatibles y enseguida cogió confianza conmigo. Empezamos a vernos todos los fines de semana y al cabo de un mes, me llevó a su casa y me presentó a su familia. Sus hermanos y sus padres me cogieron mucho cariño, y a partir del mes y medio empezamos a funcionar más "en serio", contándonos todas las cosas y con muchísima confianza. A mí me cuesta mucho enamorarme, y este chico me estaba volviendo loca. Me gustaba muchísimo, tanto físicamente como en cuanto a carácter.

Toda la relación fue genial. No nos peleamos ni una sola vez, literalmente, en cuatro meses. Todo eran buenos momentos, risas, yo le daba mucha libertad y eso a él le encantaba, él era súper detallista conmigo y yo estaba realmente bien. No ha habido ni terceras personas ni infidelidades ni nada parecido.

Lo hemos dejado a principios de marzo...

A mitad de febrero, aproximadamente sobre el 15, tuvimos una dificultad. Él no tiene trabajo ni estudia, se empezó a estresar y a pasarlo mal. Esto no repercutía en nuestra relación de pareja y lo que hacía era apoyarse en mí y desahogarse conmigo. El día que me dijo que se quería marchar me explicó que lo quería hacer por tiempo indefinido, que quería buscar trabajo en una ciudad pequeña al lado de Córdoba (actualmente vivimos los dos en la provincia de Barcelona y vamos justillos de dinero). Lo primero que pensé es que la relación podía no satisfacerle, pero él me dijo que no era en absoluto por mí, que simplemente necesitaba un cambio de aires para poder estar bien consigo mismo (tenía también muchos problemas familiares, económicos, se agobiaba por no encontrar trabajo...). Como en esos tres meses y pico todo había estado tan bien, nuestras familias ya se conocían y había muy buena relación. Mis padres reaccionaron fatal cuando les dije que se quería ir y me dijeron que era un cobarde por dejarme y pedirme de mantener una relación a distancia mientras tanto.

Sorprendentemente (yo no esperaba que fuera a hacerlo), sin que yo le dijera nada, mi novio cogió el teléfono y llamó a mi madre. Le dijo que me quería con locura y que tenía una base de amor lo suficientemente fuerte conmigo como para mantener la relación, y que si encontraba trabajo incluso me pagaría los billetes para que fuera a verle.

El caso es que lo asumimos y el sábado cogí un tren para ir a su casa (porque casualmente estaba yo con mi familia en un pueblo, no estaba cerca). Esa noche nos empezamos a liar en la cama y cuando estábamos abrazados me empezó a decir, textualmente, que yo era la chica más increíble que había conocido nunca, que había estado con otras chicas pero que nunca había estado tan cómodo y tan a gusto, que le encantaba la libertad que le daba y no se sentía para nada atado ni presionado, y que ojalá pudiera estar para siempre conmigo. Me dijo "cuando estoy contigo no pienso en ningún problema, eres como un mundo para mí. Me ayudas muchísimo.", y no dejaba de decirme que me quería. Yo notaba que sus palabras eran sinceras (soy muy intuitiva y en otras relaciones he notado enseguida la falta de interés o de amor.)

Sin embargo, a tres días de que se fuera a marchar a Córdoba le dijeron que no se podía ir, y se dio un chasco enorme. Se puso muy negativo, empezó a estar muy raro y muy irritable... Aunque tampoco es algo que aparentemente afectara a nuestra pareja.

El 25 de febrero, hace muy poquito, su familia invitó a mis padres a una feria medieval que hacían en su pueblo. Esa noche fue genial y estuve a punto de perder la virginidad con él (lo habíamos intentado dos veces antes, pero yo no podía hacerlo, me hacía mucho daño.). Me tranquilizó y me dijo que no pasaba nada, que seguiríamos intentándolo, y me dijo que me quería (me lo decía a menudo, siempre que podía).

Pero a partir del lunes siguiente las cosas empezaron a cambiar. Quedamos el miércoles, jueves y viernes de esa semana, finales de febrero, y cuando se despidió de mí no me dijo que me quería. SIn embargo, en esos tres días yo estaba con gripe y fui a pasarla a su casa, porque vivo sola en un piso en otra ciudad cercana y me encontraba muy mal. Me cuidó como si fuera el novio más atento del mundo: me traía la medicina a la cama, no me dejaba moverme, y por la noche si tosía o si me despertaba me abrazaba y me acariciaba la espalda.

El viernes me volví a mi casa, y cuando se despidió de mí se despidió como siempre pero no me dijo "te quiero", como he explicado antes. El martes de la semana siguiente me llama y me dice que me conecte al MSN. Me dice que desde que pasó la feria medieval nota que las cosas no son iguales en su cabeza, que ha empezado a verme más como a una amiga que como a una novia y que no sabe cómo reaccionar.

Yo entré en pánico: Cómo podía ser que una relación que los dos habíamos cuidado tanto y en la que teníamos tantas esperanzas fuera a terminar así? Por qué motivo había empezado a verme como una amiga, si hasta hacía una semana era el amor de su vida? Y por qué pasaba esto, sobretodo si NO HABIA TERCERAS PERSONAS?

Después de hablar con él, le dije que si tenía dudas lo mejor era que lo dejásemos temporalmente, que le iba a dar tiempo y que si estábamos tres semanas o un mes sin comunicarnos se aclararía las ideas y decidiría si me quiere o no.

Al principio era muy negativo, pero las dos veces que he hablado con él ha ido cambiando a ser un poco más positivo. Antes veía que sus miedos de verme como a una amiga lo daban todo por imposible pero ahora por lo menos nos planteamos el volver a vernos como pareja y probar, y parece animado en intentar cambiar su mentalidad.

Ah, por cierto. Yo me mantengo firme en lo que es no comunicarnos, pero él últimamente me manda algún mensaje, me pregunta por Facebook (en privados, no por chat) que cómo estoy, y hasta se ha puesto What's app y me envía mensajes desde allí porque no consigue contactar conmigo por otro lado. Siempre hablando en un tono muy familiar y amigable, eso sí (aunque sin ningún te quiero, ni me llama cielo ni nada.) Lo que veo es que han pasado tres días que hace que no hablamos y ya está con esa necesidad de saber de mí.

Yo creo que lo que tiene son dudas, potenciadas por algunos amigos (el viernes que yo me fui él salió de fiesta y luego el sábado también, estoy convencida y tengo testigos de que no se lió con nadie ni de que hay otras chicas, es todo cosa de él). También tiene verdadero pánico a quedarse sin mí como amiga, porque me había convertido en su novia-mejor amiga, como él decía.

Lo dicho, me parece imposible que en siete días se pueda desenamorar de mí, y es un chico muy sincero que siempre que ha visto algo raro me lo ha dicho.

Qué opináis vosotras? Creéis que volverá a enamorarse de mí, o a darse cuenta de que me quiere? Cuando hablamos por teléfono, le pregunté lo siguiente: "tú me quieres? Y quieres seguir conmigo, o quieres que lo dejemos?" Y me dijo que me quería y que quería seguir conmigo, pero simplemente haciendo cosas nuevas (siempre teníamos la misma rutina, aunque él decía que no es algo que le molestase).

Lo que dice es eso, que se le ha "bajado" el sentimiento, que se le ha "ido el gas".

Me parece imposible que en una semana una persona cambie así de opinión.

Decidme qué pensáis, por favor.