Como poder perdonar algo que nos afectó tanto en algún punto de nuestra vida. Eso a lo que prestamos tanta atención que ya es difícil acordarse de cómo era antes de que haya pasado. ¿Se puede perdonar a alguien y al mismo tiempo olvidar? o ¿Qué es acaso lo que viene primero?
Si uno pudiera por un minuto olvidar todo lo malo, todo el sufrimiento ¿uno puede llegar a perdonar? Es algo demasiado complicado para la mente humana. Y más, emocionalmente para un corazón vulnerable. ¿Qué es lo que hace uno cuando el dolor es tan cruel, es tan injusto y sin sentido? Es más, ¿Qué hace uno con la furia de saber que la otra persona ni se inmuta, ni lo siente, y sigue pensando que todo está bien?... que está perfecto cometer errores, que está perfecto seguir siendo igual de inmaduro que todo el mundo al verlo, le va a aplaudir sus manerias. ¡Bravo bravo! Alimentemos la ignorancia.
Entonces, ¿Qué es lo que tendríamos que hacer en estos casos? Pensemos Primero olvidar. Ojos que no ven corazón que no siente. Poblar nuestra mente de pensamientos mundanos, materialistas, inconscientes y sin sentido. O tal vez, con sentido. Pero en un aspecto tan irreal hacer, o pensar en cosas que ni en mil años hubiéramos pensado. Renovarse, pero aún sentirnos nosotros mismos. Luego, después del paso del tiempo empezar a perdonar. Pero esto es una tarea extremadamente complicada. Porqué aun habiendo olvidado, habiendo meditado la situación, habiendo sufrido sanado y volver en sí, estamos de nuevo frente al hecho de que pareciera que no hubiera pasado nada. Ni el tiempo, ni el espacio, ni la mejoría. Volvemos al principio. Que encrucijada lo mejor de dos mundos.
Llego a la conclusión acerca de este tema tan controversial, de que lo mejor sería dejar que fluya... que la vida siga. Sin que se vea infundada en los recuerdos del pasado. Es necesario saber y comprender que el problema no es nuestro. Es de alguien más ¿Por qué deberíamos enfocar nuestras energías en entender el porqué de los actos de alguien, y más aún porque debería afectarnos? ¡A vivir la vida como se nos plazca! Deberíamos seguir lo que diga nuestro corazón, simplemente dejarse llevar por las intuiciones y por lo que se siente interiormente. Uno puede llegar a equivocarse, sin dudas, pero de eso se trata la vida, no de equivocarse, sino de aprender y uno va tomando experiencia a través de los errores y los aciertos. No hay que desanimarse si las cosas salen mal, porque el errar significa estar cada vez más cerca del acierto.
Let me be, let us be.
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