Ahh bueeeeeeeeeeno
flaca, debes tener una grossa (y muy graciosa) fijación anal. Es mas o menos así:Cuando somos chiquitos, al rededor de los 2 años, encontramos gran placer en actividades relacionadas a la defecación.
En expulsar, retener, jugar con el excremento etc. Ese placer más tarde se sublima o canaliza a traves de actividades socialmente aceptadas, como la artesanía, amasar, y otras cosas. Pero parece que lo tuyo es grave, querida, aunque inevitablemente simpático. TE aconsejo ver a un buen psicoanalista. Y solo por curiosidad: que opina tu pareja, si es que?
Sldos.
Vane