Esta historia es real. En estos tiempos difíciles, reunimos al hombre más viejo con el bebé más joven.
Madrid. Aitana Martínez a tres horas de nacer. Mallorca. Josep Mascaró 102 años.
Hola Aitana, me llamo Josep Mascaró y tengo 102 años. Soy un suertudo. Suerte por haber nacido, como tú. Por poder abrazar a mi mujer. Por haber conocido a mis amigos. Por haberme despedido de ellos. Por seguir aquí.
Te preguntarás cuál es la razón de venir a concerte hoy, es que muchos te dirán que a quién se le ocurre llegar en los tiempos que corren, que hay crisis que no se puede Ja! esto te hará fuerte. Yo viví momentos peores que este, pero al final, de lo único que te vas a acordar es de las cosas buenas.
No te entretengas en tonterias que las hay, y vete a buscar lo que te haga feliz que el tiempo corre muy deprisa. He vivido 102 años y te aseguro que lo único que no te va a gustar de la vida es que te va a parecer demasiado corta. Estás aquí para ser feliz.
Es todo un ejercicio de alabanza a la vida, esta vida de la que muchas veces nos quejamos yo la primera. Pero el abuelo, como casi todos los abuelos, tiene razón, lo que vale en la vida es el amor y los buenos momentos.
En estos momentos de crisis y de dificultad, estoy rodeada, como todos, de gente que está pasando por malos momentos, enfermedades, dificultades económicas, falta de trabajo
Hay formas de enfrentarse a todos estos problemas, de manera positiva o negativa.
Muchas personas lo ven todos negativo, se levantan por la mañana y salen a la calle pensando que el mundo está contra ellos, que todo es malo, que todo es feo y que todo es negativo, viven permanentemente enfadados, angustiados. Esas son las tonterías en las que el abuelo le dice a su nieta que no hay que entretenerse. Cuando hay problemas.. hay que pasarlos de manera positiva, lo positivo atrae a lo positivo. El dinero va y viene, el trabajo también. Hay que luchar con ánimo y sonreir a las dificultades te harán más fuerte.. dice el abuelo.
De todos estos problemas, es la enfermedad lo que realmente es más duro y, sin embargo, las personas que están directamente sufriendo las enfermedades son las que están viviendo cada día, cada minuto, cada segundo de esta etapa de manera más positiva. El abuelo tiene razón, lo peor es que para mi cuñada y para muchas personas enfermas de cancer la vida es muy corta, a veces demasiado. Ella tiene 48 años y ahora antes de marcharse está junto con mi hermano y sus 4 hijos, recordando los momentos buenos, aferrándose a la vida, porque adora la vida. Ella me ha enseñado todo lo que este abuelo le ha contado a la pequeña Aitana. Ella me ha dado una lección de vida.
Gracias Fina por todos los buenos momentos que hemos vivido juntas y gracias por no entretenerte en tonterías. Eres una suertuda, has podido abrazar a tu marido y a tus hijos, has conocido a muchos, muchos amigos que te quieren, y te has podido despedir de ellos. La vida ha sido muy corta para ti, más que para la mayoría, pero tu nunca te irás. Siempre estarás entre nosotros, porque han sido tantísimas cosas buenas las que nos has dado que permanecerás en nuestro corazón, todos los que hemos tenido la suerte de conocerte no podremos olvidarte NUNCA, siempre estarás con nosotros, tu vida será muy larga,.. vivirás en nosotros. Estabas aquí para ser feliz, lo has sido y HAS HECHO FELIZ A MUCHISIMA GENTE. GRACIAS.