Paciencia
Creo que primeramente deberías pensar: '¿Por qué tengo fobia social? ¿Por qué debería sonrojarme al estar con gente?'. Piensa en de qué manera te relacionas con tu familia y sobre todo cómo has llegado a relacionarte con el padre de tu hijo. ¿Por qué no podrías intentar ser así con otras personas? Es cuestión de conseguir confianza en ti misma y en el amor propio que debes tener. Por otro lado, tu hija y futurx hijx te van a necesitar, pero que no sea esta la razón para seguir viviendo. No como una responsabilidad, sino el amor que les tienes o vas a tener, que te va a aportar felicidad. Quizá también podrías apuntar a alguna actividad a tu niña en la que hiciera falta que los padres participaran, y así poder interactuar con otros adultos, o apuntarte tú a alguna actividad, ya sea artística, deportiva o intelectual, y ponerlo un poco más 'fácil' para empujar el contacto con otra gente. Hay que luchar contra los miedos, y la mejor forma es enfrentándose a ellos. Sé que suena fácil y en la práctica no lo es, pero es la realidad. Si, por ejemplo, uno de tus miedos es quedar en ridículo por tus conocimientos, intenta leer y culturizarte para tener de lo que hablar cuando se dé una situación social. Piensa que no eres inferior a los demás ni nada por el estilo por lo que te pasa. Sólo intenta buscarle remedio a las causas por las que te da miedo socializar para sentirte más segura a la hora de plantarle cara.
Yo no tengo ereutofobia, pero sí que me ruborizo fácilmente, y la verdad es que esto me incomodaba mucho antes y me daba mucha vergüenza, pero he aprendido que no es nada malo, y que conforme más controles tus nervios más controlarás esto. Es más, hay gente a la que le parece tierno que esto ocurra, por lo que no es nada de lo que avergonzarse o a lo que tener pánico.
Sé que todo lo que te he dicho te resultará muy difícil, pero el primer paso es intentarlo. Y si caes, levantarte y volverlo a intentar. Lo único que quiero decir es que si de verdad quieres dejar de vivir, que sea habiendo intentado solucionar tu problema y llegándolo a lograr, y entonces decidir si sigues teniendo la idea de suicidarte o no. Eso ya es tu propia decisión. Y que sepas que no estás sola, no te sientas un bicho raro.
Estoy estudiando psicología