Lo fácil es culparte a tí de los problemas que tengan como familia. En vez de hacer autocrítica, ya que todos tendréis un pedazo de culpa. Ni los malos son tan malos, ni los buenos son tan buenos.
Dices que a tu cuñada le pagan muchas cosas (luego de vez en cuando se les escapa algo), pero no le dice nada. Ponte en "sus zapatos". Echárselo en cara se va a volver en tu contra. 1 Es su hija, igual que a tu marido le han prestado dinero por ser su hijo. 2 Tus suegros pueden darle el dinero a quien quieran, sin explicaciones. 3 Quizá lo nieguen, para evitar una situación violenta.
Por muy buena voluntad que pongas, no son tus padres. Pero tu marido DEBE visitarles. Como mujer y como madre, empatizo con ella en este punto. Supongo que los desprecios le duelen y no sabe como tratarles.
Mi cuñada va poco a ver a sus suegros, pero su marido y sus dos hijos pasan el día un domingo al mes. Cuando sean adolescentes, ya veremos. Viven cerca, a 40 kms con mucho transporte público. En su casa no hay problemas de dinero, así que ésa no es la excusa.
La gran ausente tiene comida con las amigas, salvo el día de navidad, los cumpleaños de los dos hijos y el marido, y una cita en verano.
No te conviene llevarte mal con ellos. Sé que duele, yo estoy pasando por lo mismo, pero no te cabe otra. Procura ignorarles todo lo que puedas, visitarles poco (mil excusas) y olvidarte de sus cosas.
Supongo que ahora estáis más sensibles por vuestros problemas económicos y de trabajo. Piensa que tus padres y hermanos tampoco son perfectos, a veces, se equivocan.
Ánimos.