Hola chic@as.
Os voy a contar un poco mi historia, por si a alguna de las personas que andan por aquí le puede servir. A mí me ayudó mucho leeros cuando estaba metida en el pozo.
Mi pesadilla comenzó hace algo más de un mes. Después de 2 años de convivencia una mañana me levanté y él me había dejado. Al principio yo no le dí importancia pensando que era simplemente un bajón puntual (ya que había tenido algún momento más del típico 'no sé lo que quiero')
Para que entendáis un poco la historia él es 13 años mayor que yo, con lo cual yo siempre me había sentido protegida y segura a su lado al ser mucho mayor que yo.
Bueno, el día que me dejó no le dí importancia, seguí con mi vida y ese día no nos vimos. Al día siguiente vino a casa a por sus cosas, me dijo que no estaba enamorado de mí, que no me quería y que estaba conociendo a otra persona. Dos días después estaba ya con ella.
Yo me fui unos días a casa de mis padres y fueron los peores días de mi vida. Es cierto que él en todo momento me cogió el teléfono, me contestó a los mensajes... pero todos iban en la misma línea. "No soy feliz contigo y no estoy enamorado de ti".
Yo hice lo posible y lo imposible por recuperarle... hasta le mandé un regalo de San Valentín. El seguía en sus trece. A la vuelta de esos días en casa de mis padres nos vimos, yo lloré hasta quedarme sin lágrimas, supliqué, me arrastré. Y no conseguí más que agobiarle y sentirme fatal.
Tomé la decisión de parar, coger aire y estar bien. No fue fácil, pero conseguí estar varios días sin escribirle. En ese periodo de tiempo volví a salir con mis amigos, a recuperar mi vida de soltera... y hasta a conocer a un chico. Cuando me encontré más recuperada le llame, le dije que no se preocupara que yo estaba bien y que fuera feliz. A partir de ese momento volvimos a hablar desde la amistad y el cariño... el hacía su vida con su chica, y yo empezaba a dejarme querer por otras personas. Hace unos días era nuestro aniversario, y decidimos celebrarlo juntos. Aunque no estuviéramos juntos, teníamos mucho que celebrar. Nos habíamos conocido, nos habíamos querido y habíamos compartido unos años preciosos. Y esa noche, algo cambió.
Aunque no pasó nada entre nosotros, las miradas, un abrazo... creo que esa noche nos dimos cuenta, los dos, que aún nos queríamos.
Al día siguiente me armé de valor y le invité a cenar. No solo cenó conmigo, sino que desde ese día, no nos hemos separado más. Él cerró la historia con la persona que estaba conociendo y ahora se lo está currando, pero currando de verdad.
Hemos hablado horas y horas, expuesto las cosas que nos distanciaron, hemos hecho cosas que nunca habíamos hecho juntos en nuestra relación... Chicas, si de verdad esa persona es para vosotras, volverá. Si de verdad os merece, os valora y os quiere, volverá antes o después.
A veces necesitamos parar y ver las cosas con perspectiva.
Espero que a alguien le sirva mi historia, y contado conmigo para lo que queráis.
Ánimo.