"el perro del hortelano"
Cómo se puede superar una ruptura..cuando la persona que te ha dejado cada cierto tiempo vuelve a aparecer en tu vida, mensajes, llamadas etc... y cuando intentas hablar con él para aclarar la situación, te devuelve con indiferencia, orgullo ... y falta de compromiso..?
Cómo llamarías a esto..? Chantaje emocional..?
Ver también
Lo llamaría...
ser poco hombre, tener necesidad de hundirte para sentirse mejor, por tanto por qué no evitas coger sus llamadas, borra sus mensaje antes de leerlos ? vive feliz
suerte
Este es mi mismo caso
parece como si lo hubiera escrito yo , exactamente es lo q me pasa a mi , cuando empiezo a levantar cabeza empieza él con sms , diciéndo mil y una cosas preciosas , me vuelve loca , pues he intentado de todas las maneras darle mil y una oportunidades pero cuando ésto pasa se vuelve a echar para atrás y cuando me ve a mi mejor , otra vez empieza con la misma cantinela.
No sé como tratar la situación , a ver si nos dicen como actuar .
Lo llamaría...
ser poco hombre, tener necesidad de hundirte para sentirse mejor, por tanto por qué no evitas coger sus llamadas, borra sus mensaje antes de leerlos ? vive feliz
suerte
Idem
a mi me pasa lo mismo y leugo regresa komo si nada en plan bien, y leugo vueve a decirme k soi io k malinterpreto sus palabras,. ... pues k no diga nada mejor kaiadito y desaparecido komo hizo kuadno me dejo........
no los entiendo s alguien nos da mas konsejos........
kuando lleva tiempo si nsaber de mi ala ahi apareceeeeeeeeeee afg io ia borre numero etc pero k mas da si me lo se de memoria..... y si llega algun sms se k es del....... en fin resignacion espero olvidarlo algun dia ........
Idem
a mi me pasa lo mismo y leugo regresa komo si nada en plan bien, y leugo vueve a decirme k soi io k malinterpreto sus palabras,. ... pues k no diga nada mejor kaiadito y desaparecido komo hizo kuadno me dejo........
no los entiendo s alguien nos da mas konsejos........
kuando lleva tiempo si nsaber de mi ala ahi apareceeeeeeeeeee afg io ia borre numero etc pero k mas da si me lo se de memoria..... y si llega algun sms se k es del....... en fin resignacion espero olvidarlo algun dia ........
Yo no sé que aconsejaros...
Pero sí deciros, lo que yo haría....cuando me llame, me envíe mensajes, y empiece con sus bonitas palabras....le daría "cuerda"...es decir...que te dice tengo ganas de verte, que te echo de menos, etc.etc....le contestas...en plan sarcástico "uhmmm...pues anda que yo"...e inmediatamente, le diría...chico tengo que dejarte, me voy a pelu..hoy tengo cena especial.
Si quieres contestarle al mensaje...lo mismo...si te dice que cuando quedáis...pues le dices...."Te llamo enseguida....ahora no te puedo decir el día...ando liadísima"...es pagarle con la misma moneda..pero dejando claro que te importa un pito.
Si ellos ven que aún seguis colgadas...pierden el interés, es qué os pueden tener cuando quieran....hay que demostrarles, que ni frio ni calor, eso les va a doler más....ellos vuelven, alimentan su ego (porqué ven que aún los queréis)...y se van.
Yo...lo que le doy ahora al mío...es una cal y otra de arena....anda muy despistado...pero ahora él, no me importa...me importo yo.
Yo no sé que aconsejaros...
Pero sí deciros, lo que yo haría....cuando me llame, me envíe mensajes, y empiece con sus bonitas palabras....le daría "cuerda"...es decir...que te dice tengo ganas de verte, que te echo de menos, etc.etc....le contestas...en plan sarcástico "uhmmm...pues anda que yo"...e inmediatamente, le diría...chico tengo que dejarte, me voy a pelu..hoy tengo cena especial.
Si quieres contestarle al mensaje...lo mismo...si te dice que cuando quedáis...pues le dices...."Te llamo enseguida....ahora no te puedo decir el día...ando liadísima"...es pagarle con la misma moneda..pero dejando claro que te importa un pito.
Si ellos ven que aún seguis colgadas...pierden el interés, es qué os pueden tener cuando quieran....hay que demostrarles, que ni frio ni calor, eso les va a doler más....ellos vuelven, alimentan su ego (porqué ven que aún los queréis)...y se van.
Yo...lo que le doy ahora al mío...es una cal y otra de arena....anda muy despistado...pero ahora él, no me importa...me importo yo.
Vaya, veo que no soy la única..!!
Estoy de acuerdo contigo en lo de alimentar su ego... y además a mi a veces me entra una impotencia...!!! porque me dan ganas de gritarle...pero que pasa contigo tío.. te piensas que no tengo otra cosa mejor que hacer que estar disponible para ti en el momento que a ti te apetezca o qué?!
A mi una de las últimas veces llegó incluso a perseguirme con el coche porque nos cruzamos por la calle para intentar hablar conmigo.. Luego reaccioné muy borde con él y ahora está de lo más ofendido...
La verdad que ahora ya hasta me empiezo a reir de la situación ridícula.
El hombre ambivalente
Hola a tod@s
Por se sirve de algo, yo estuve saliendo con un chico que se comportaba así. Se mostraba super interesado y cuando me tenía, desaparecía durante semanas. Me pedía que fuera a verle a su ciudad y me decía que me echaba de menos y cuando iba no encontraba tiempo para mí y apenas me veía durante unas pocas horas. Al final estaba tan confundida con su comportamiento que decidí dejarle. Hace poco otra forera me pasó un privi sobre el hombre ambivalente y, por fin, he entendido su comportamiento y aunque yo ya tenía esa sospecha, ese mensaje me las confirmó. He mirado en internet y encontré este artículo. Espero que os ayude a despejar incógnitas como a mí.
Ahora sólo me falta despejar la incógnita de como su nueva novia con la que se fue a vivir al mes de conocerla porque, según él necesitaba su piso, y a la que le hizo la faena y ella lo pilló de intentar quedar conmigo a tomar algo el mismo día que se mudaba con ella (yo no sabía nada de ella hasta ese momento y hacía sólo dos meses que habíamos roto) no le ve venir siendo psicóloga!! No quiero ofender a nadie pero no se supone que son profesionales en comportamientos humanos?? No lo entiendo, si alguien me lo puede explicar...
Ahí os dejo el artículo, es un poco largo pero vale la pena leerlo hasta el final:
El que se va sin que lo echen
El hombre ambivalente
Un día nos quieren y otros no. Al final, una desearía no haberlos conocido.
Es como la historia de Dr. Jekyll y Mr. Hyde. Si bien no hay asesinatos, la autoestima suele quedar bastante herida.
Por un lado, Jekyll es capaz de estar un mes o más tiempo en campaña para que salgan con él. Llama casi todos los días para lograr su objetivo y puede llegar a ser el hombre más encantador del mundo, mientras nos mira con ojos de enamorado, hasta que
No se sabe si fue algo que se dijo, algo que se hizo o si el clima y la alineación de las estrellas habrán influido. Lo único claro es que aparece Mr. Hyde, con su actitud de yo no te conozco, casi castigando a la mujer que osó creer que él podría estar interesado en algo serio con ella. Otras veces, simplemente desaparece durante semanas para luego regresar a tierras conocidas, con la misma cara de siempre, como si esto del ir y venir fuera parte de su naturaleza humana, de su especie que parece ser una diferente a la nuestra.
Es un demente para algunas, un ser que se quiere dejar en el olvido lo antes posible. Es el hombre ambivalente que describe la terapeuta Rhonda Findling en su libro No le llames. Según la norteamericana, este tipo de hombres:
1.- Le dice a una mujer que la ama, para luego comenzar una relación con otra. Aún así, algunos temerarios insisten en que quieren estar con una, pese a estar con otra u otras.
2.- Constantemente le expresa a una mujer que la echa de menos, pero por algún extraño motivo nunca tiene tiempo para verla.
3.- Al día siguiente de haber salido con él y de haber sentido una gran conexión, actúa de manera distante y formal.
4.- Nunca llama cuando afirma que lo hará y cancela las citas que ha acordado.
5.- Suele llegar siempre atrasado o derechamente dejar plantada a su víctima.
6.- Se le distingue por tener una facilidad envidiable para esfumarse por semanas, y luego reaparecer sin arrugarse.
Desde la perspectiva psicológica, la ambivalencia es un estado de ánimo, transitorio o permanente, en el que coexisten dos emociones o sentimientos opuestos, como lo explica la Real Academia. Dicho de otro modo, se refiere a personas que un día dicen que nos quieren y al otro desaparecen de la escena, que tras mostrar todas las señales de interés, reaccionan casi como ofendidos cuando la mujer los encara.
El peligro está en que, como explica Findling, este tipo de hombres puede hacer que una mujer se sienta rechazada o abandonada, afectando su autoestima al verse a sí misma como la más reprochable del mundo, ya que algo muy atroz debió haber dicho o hecho como para que terminaran escapando así de ella.
El miedo a perder a ese hombre nos lleva, a su vez, a aferrarnos todavía más a él y no dejar de llamarlo y perseguirlo () Puesto que no entendemos su actitud impredecible, empezamos a dar vueltas a todo lo ocurrido con él para averiguar qué es lo que debemos haber hecho mal. Nos autocensuramos por haber dicho o hecho cosas por las que normalmente no nos disculparíamos y que, sin embargo, ahora nos hacen sentir tremendamente culpables, cosa que como ya se puede imaginar representa un craso error.
Ambivalencia literaria
Yo volví andando a casa y no me preocupó cómo volvía ella a la suya. Simplemente me marché. Después añadió: Es muy extraño... Me refiero a que la chica me gustaba, me gustaba de veras. Y en aquel momento me harté de ella. Las vírgenes suicidas, de Jeffrey Eugenides.
¿Qué lleva a un hombre a comportarse como un demente?
Otra mujer, miedo al compromiso, problemas de confianza que lo llevan a jugar con otras personas de la misma forma que alguna vez jugaron con él, dice Fernando (26) y no difiere mucho de lo que explica la terapeuta, quien achaca este comportamiento a un serio problema de inmadurez de alguien que ve a la mujer como una extensión de sí mismo en vez de un ser aparte, por lo que espera de ella satisfaga sus necesidades emocionales, sexuales o económicas.
Pero le entra el pánico cuando se ve demasiado implicado en una relación, se siente engullido por una mujer por la que se siente atraído, y para aliviar esa ansiedad, se distancia o desaparece () Hará todo cuanto sea necesario para no tener que soportar el terror y la vergüenza de su propia vulnerabilidad, afirma Findling.
Hay que ser realistas y aceptar la vieja verdad universal de que un hombre no cambiará, ni por arte de magia ni por nosotras. Así que nada de jugar a las psicólogas. Lo único que se puede hacer es recomendarle que visite a un profesional que lo ayude con sus problemas de seguridad y confusión emocional. Y lo más importante: hacerse a un lado, para no terminar igual de insegura que él. Pero cuidado con las recaídas. Mr. Hyde suele regresar al escenario del crimen.
El hombre ambivalente
Hola a tod@s
Por se sirve de algo, yo estuve saliendo con un chico que se comportaba así. Se mostraba super interesado y cuando me tenía, desaparecía durante semanas. Me pedía que fuera a verle a su ciudad y me decía que me echaba de menos y cuando iba no encontraba tiempo para mí y apenas me veía durante unas pocas horas. Al final estaba tan confundida con su comportamiento que decidí dejarle. Hace poco otra forera me pasó un privi sobre el hombre ambivalente y, por fin, he entendido su comportamiento y aunque yo ya tenía esa sospecha, ese mensaje me las confirmó. He mirado en internet y encontré este artículo. Espero que os ayude a despejar incógnitas como a mí.
Ahora sólo me falta despejar la incógnita de como su nueva novia con la que se fue a vivir al mes de conocerla porque, según él necesitaba su piso, y a la que le hizo la faena y ella lo pilló de intentar quedar conmigo a tomar algo el mismo día que se mudaba con ella (yo no sabía nada de ella hasta ese momento y hacía sólo dos meses que habíamos roto) no le ve venir siendo psicóloga!! No quiero ofender a nadie pero no se supone que son profesionales en comportamientos humanos?? No lo entiendo, si alguien me lo puede explicar...
Ahí os dejo el artículo, es un poco largo pero vale la pena leerlo hasta el final:
El que se va sin que lo echen
El hombre ambivalente
Un día nos quieren y otros no. Al final, una desearía no haberlos conocido.
Es como la historia de Dr. Jekyll y Mr. Hyde. Si bien no hay asesinatos, la autoestima suele quedar bastante herida.
Por un lado, Jekyll es capaz de estar un mes o más tiempo en campaña para que salgan con él. Llama casi todos los días para lograr su objetivo y puede llegar a ser el hombre más encantador del mundo, mientras nos mira con ojos de enamorado, hasta que
No se sabe si fue algo que se dijo, algo que se hizo o si el clima y la alineación de las estrellas habrán influido. Lo único claro es que aparece Mr. Hyde, con su actitud de yo no te conozco, casi castigando a la mujer que osó creer que él podría estar interesado en algo serio con ella. Otras veces, simplemente desaparece durante semanas para luego regresar a tierras conocidas, con la misma cara de siempre, como si esto del ir y venir fuera parte de su naturaleza humana, de su especie que parece ser una diferente a la nuestra.
Es un demente para algunas, un ser que se quiere dejar en el olvido lo antes posible. Es el hombre ambivalente que describe la terapeuta Rhonda Findling en su libro No le llames. Según la norteamericana, este tipo de hombres:
1.- Le dice a una mujer que la ama, para luego comenzar una relación con otra. Aún así, algunos temerarios insisten en que quieren estar con una, pese a estar con otra u otras.
2.- Constantemente le expresa a una mujer que la echa de menos, pero por algún extraño motivo nunca tiene tiempo para verla.
3.- Al día siguiente de haber salido con él y de haber sentido una gran conexión, actúa de manera distante y formal.
4.- Nunca llama cuando afirma que lo hará y cancela las citas que ha acordado.
5.- Suele llegar siempre atrasado o derechamente dejar plantada a su víctima.
6.- Se le distingue por tener una facilidad envidiable para esfumarse por semanas, y luego reaparecer sin arrugarse.
Desde la perspectiva psicológica, la ambivalencia es un estado de ánimo, transitorio o permanente, en el que coexisten dos emociones o sentimientos opuestos, como lo explica la Real Academia. Dicho de otro modo, se refiere a personas que un día dicen que nos quieren y al otro desaparecen de la escena, que tras mostrar todas las señales de interés, reaccionan casi como ofendidos cuando la mujer los encara.
El peligro está en que, como explica Findling, este tipo de hombres puede hacer que una mujer se sienta rechazada o abandonada, afectando su autoestima al verse a sí misma como la más reprochable del mundo, ya que algo muy atroz debió haber dicho o hecho como para que terminaran escapando así de ella.
El miedo a perder a ese hombre nos lleva, a su vez, a aferrarnos todavía más a él y no dejar de llamarlo y perseguirlo () Puesto que no entendemos su actitud impredecible, empezamos a dar vueltas a todo lo ocurrido con él para averiguar qué es lo que debemos haber hecho mal. Nos autocensuramos por haber dicho o hecho cosas por las que normalmente no nos disculparíamos y que, sin embargo, ahora nos hacen sentir tremendamente culpables, cosa que como ya se puede imaginar representa un craso error.
Ambivalencia literaria
Yo volví andando a casa y no me preocupó cómo volvía ella a la suya. Simplemente me marché. Después añadió: Es muy extraño... Me refiero a que la chica me gustaba, me gustaba de veras. Y en aquel momento me harté de ella. Las vírgenes suicidas, de Jeffrey Eugenides.
¿Qué lleva a un hombre a comportarse como un demente?
Otra mujer, miedo al compromiso, problemas de confianza que lo llevan a jugar con otras personas de la misma forma que alguna vez jugaron con él, dice Fernando (26) y no difiere mucho de lo que explica la terapeuta, quien achaca este comportamiento a un serio problema de inmadurez de alguien que ve a la mujer como una extensión de sí mismo en vez de un ser aparte, por lo que espera de ella satisfaga sus necesidades emocionales, sexuales o económicas.
Pero le entra el pánico cuando se ve demasiado implicado en una relación, se siente engullido por una mujer por la que se siente atraído, y para aliviar esa ansiedad, se distancia o desaparece () Hará todo cuanto sea necesario para no tener que soportar el terror y la vergüenza de su propia vulnerabilidad, afirma Findling.
Hay que ser realistas y aceptar la vieja verdad universal de que un hombre no cambiará, ni por arte de magia ni por nosotras. Así que nada de jugar a las psicólogas. Lo único que se puede hacer es recomendarle que visite a un profesional que lo ayude con sus problemas de seguridad y confusión emocional. Y lo más importante: hacerse a un lado, para no terminar igual de insegura que él. Pero cuidado con las recaídas. Mr. Hyde suele regresar al escenario del crimen.
Madre mía!! pero que razón tienes...
me he sentido tristemente identificada con algunas de las situaciones que has descrito y sabés qué...?!
Lo que más me entristece es darme cuenta de que por mucho que quieras a esta persona y hasta es posible que él también te quiera... nunca voy a poder llegar a nada con él, porque aún habiendo sentimientos de por medio su inseguridad y su inmadurez emocional le impiden implicarse como se debe en una relación.
A mi llegó un punto que me tenía socabada mi autoestima.. ahora ya no, me he empezado a decepcionar... pero te quedan unas heridas muy grandes.
Madre mía!! pero que razón tienes...
me he sentido tristemente identificada con algunas de las situaciones que has descrito y sabés qué...?!
Lo que más me entristece es darme cuenta de que por mucho que quieras a esta persona y hasta es posible que él también te quiera... nunca voy a poder llegar a nada con él, porque aún habiendo sentimientos de por medio su inseguridad y su inmadurez emocional le impiden implicarse como se debe en una relación.
A mi llegó un punto que me tenía socabada mi autoestima.. ahora ya no, me he empezado a decepcionar... pero te quedan unas heridas muy grandes.
Te entiendo
el mío cubría todos los puntos, chica. el artículo me ha dejado de piedra!!
Y es verdad lo que dices que apena porque todavía creo que yo sí que le gustaba de verdad y que eso precisamente fue lo que le hizo salir corriendo. Le dió pánico la posibilidad de enamorarse y ponerse en una situación de vulnerabilidad donde le podrían hacer daño si la relación no funciona y donde podía perder el control sobre sus sentimientos y la situación. Además, me vió una mujer segura e independiente y aunque, precisamente eso era lo que le atraía, no sabía como lidiar con ello. Cuando por fin, estábamos a punto de vivir en la misma ciudad debido a su insistencia de meses atrás, vió que ya había llegado el momento de dar ese paso y huyó. Como he dicho, lo que no entiendo es como su actual novia que es psicóloga no lo ve. Supongo que es muy joven, estará enamorada y todos somos humanos y posiblemente al ser psicóloga creerá que ella sí le puede ayudar. La verdad es que ojalá le pueda ayudar porque eso significaría que habría un capullo menos suelto pero dudo mucho que alguien así se deje ayudar.
Y es verdad que las heridas son muy grandes porque cuando estás con él no entiendes su comportamiento y no sabes como debes comportarte tú y todo acaba siendo tan poco natural. Y luego cuando por fin encuentras fuerzas para enviarle a paseo, te quedas obsesionada pensando como alguien que parecía tan perfecto y que le gustabas tanto, ha podido darte los desplantes que te dió. Intentas encontrar respuestas y eso te mete en una espiral que acaba obsesionándote. Después ya aceptas que tienes que dejarle ir de tu vida y sacarle de tus pensamientos pero se te queda una enorme decepción y una desconfianza hacía todos los del sexo contrario que no es fácil de borrar.