El problema de los que somos así y nos tiene que servir de aprendizaje, es callarnos. Por eso el bajón luego es peor, porque somos como un techo en el que va cayendo nieve lentamente, en el que parece que no pasa nada, pero llega un punto en el que el peso ya se hace insoportable y por un pequeño copo más, se derrumba completamente.
Ahora tocas fondo, pero forma parte de tu personalidad. Lo mejor de estar así es que sabes que a la próxima estarás bien. La tristeza es un estado más, hay que dejar que pase sin hacerte más daño, tómalo como un resfriado que dura unos días y hay que pasarlo.
Pero sobre todo toma nota para la próxima vez, y no te tragues todo. No digo siempre, pero de vez en cuando hay que sacar tu personalidad a relucir, pese a quien pese.
Porque además la mayoría de gente es egoísta y de cuando en cuando hay que entrar en batalla, eso cuando tu lo creas conveniente, pero hay que hacerlo, así refuerzas tu yo también, de cara a fases como esta.
Espero mis palabras te sirvan ni que sea para verlo desde otro prisma. En realidad todo es muy relativo, y personas que valgan la pena son normalmente pocas en la vida de cada uno, por mucho que haya gente que venda lo suyo de otra manera.
Sus vidas en general son bastante patéticas, hasta las de los que les sobra la pasta.