Psicomotricidad
Yo siempre me di cuenta de que mi hijo mayor, desde los 3 años derramaba todo de la cuchara, se tropezaba con todo, era lo que se puede denominar, un niño un poco torpe. Quise ponerlo entonces en clases de psicomotricidad pero mi esposo no quiso porque no lo consideraba necesario. A partir de los 18 meses estuvo en un Centro de Estimulación Temprana donde se cercioraron de que gateara en patrón cruzado, que tuviera buen agarre indice-pulgar (pinza digital) y todo lo que influye en el buen desempeño de un niño. Sin embargo, eso no fue suficiente, como te dije antes. Cuando tuvo 4 años y sabía absolutamente todo lo que tenia que saber de las clases del preescolar, presentaba los mismos problemas de coordinación motriz gruesa y fina. Eso no le permitia avanzar en su aprendizaje. Sabía perfectamente todas las letras, pero era incapaz de agarrar el lápiz correctamente y ésto imposibilitaba su desempeño en lecto escritura. Pues unas terapias de psicomotricidad han sido nuestras aliadas, tal y como habia previsto un año antes. Ahora tiene 5 años y todavía está recibiendo su terapia pero ha avanzado a tal grado que me emociono de tan solo recordar todo lo que él quería hacer antes y no podia y ahora puede. Si quieres, evalúalo con una terapista psicomotriz, a ver qué te dice.
Un abrazo y que todo salga en orden divino,
Lau
