Me siento rechazada por mi hijo de 14 meses
Hola a todas, soy nueva en este foro, aunque os he leido en multitud de ocasiones.....
Mi problema es que me siento rechazada por mi bebe de 14 meses, claramente prefiere al padre en multitud de ocasiones, y estoy desesperadamente triste y desilusionada, confundida y desconcertada.
Mi caso no es el típido de "mama pasa todo el día en casa y cuando llega papá ya sólo quiere irse con él" para nada, nosotros hemos pasado por varias etapas, ha habído meses que yo he estado todo el día con él en casa, y su padre llegaba por la tarde (el niño se ponía como loco cuando le veía entrar), y otras que era su padre el que se quedaba con él en casa y yo llego llegaba a medio día (me ve entrar, me mira y sigue a lo que estaba).
Soy cariñosa con él, muy besucona, juego y pasa tiempo con mi hijo, le hago reir etc.... pero si su padre pasa por nuestro lado, ya me aparta y llora para ire con él, a la inversa nunca me ha pasado, nunca ha llorado por vernirse conmigo.
Siento que no tiene apego a mi, y no entiendo por qué.... practicamos colecho desde que nació, ni uso carrito, le he porteado siempre en mi pecho, he sacado paciencia de dónde no la tenía en los momentos más difíciles, y nada.... no tiene apego a mi. Sólo cuando una cuidadora se quedó con él por una semana, y yo llegaba a medio día, era que notaba su cariño, porque llegaba a casa y se ponía contento...
Puedo poner muchos ejemplos de su predilección paterna. Por ejemplo le estoy bañando (que le encanta) y si ve pasar al padre por el pasillo ya llora para que le bañe él. Estamos pasando el día los tres justos (no echa de menos a ninguno porque llevamos horas los tres juntos) si le cojo yo se revuelve y echa los brazos al padre, sólo quiere que le coja él. Se despierta por la mañana y estoy yo a su lado, acariciandole la mejilla y dándole los buenos días con mucha ternura... me aparta la mano y busca a su padre (que está fuera de la habitación) y llora para que venga. Así multitud de ejemplos.
Su padre no es tan cariñoso como yo, pero también juega con él, el cambia y dá de comer etc.... Si estamos el niño y yo a solas está muy bien conmigo, pero si su padre entra en escena, yo ya no existo. Y esto me entristece profundamente, me siento fracasada como madre y siento que todo esto es muy injusto. Sé que el niño no tiene maldad alguna, y que es completamente inconsciente de su comportamiento, y que aquí la palabra justicia e injusticia no tiene sentido, pero es lo que siento... que es injusto que yo, que he sido la que he sacrificado más no me siento recompensada....Soy la que se ha comido toda la mierda! hablando mal y pronto! y a cambio, sólo recibo rechazo. Yo soy la que pasé 30 horas de parto mientras que su padre bostezaba de aburrimiento, yo soy la que se ha comido casi todas las noches en vela, y los llantos interminables de cólicos, la que ha puesto en peligro su trabajo faltando en multitud de ocasiones porque el niño estaba malo, la que lo ha sacrificado todo ... Sé que mi mayor recompensa es que mi hijo esté feliz y sano, pero necesito saber que me quiere, porque me voy a volver loca.
Ver también
Hola. Tu narración es clarísima y comprendo lo terrible que te debes sentir. En realidad no tengo la explicación correcta para este comportamiento del niño, pero no tengas la menor duda que tu hijo te ama aunque en este momento no veas sus demostraciones de afecto o apego hacia tí. Algunos niños como que hacen más química con ciertas personas; particularmente me pasaba con dos bebés de mi sobrino que me miraban y era como ver a la bruja del cuento, comenzaban a llorar y a rechazarme, no me las ganaba por nada y sin embargo con mi hermana (que no es precisamente un ángel caído del cielo), pues eran amor y apego total. Esto lo hace sentir a uno terrible; espera un poco que el niño crezca y verás cómo cambian las cosas. Saludos
Hola a todas, soy nueva en este foro, aunque os he leido en multitud de ocasiones.....
Mi problema es que me siento rechazada por mi bebe de 14 meses, claramente prefiere al padre en multitud de ocasiones, y estoy desesperadamente triste y desilusionada, confundida y desconcertada.
Mi caso no es el típido de "mama pasa todo el día en casa y cuando llega papá ya sólo quiere irse con él" para nada, nosotros hemos pasado por varias etapas, ha habído meses que yo he estado todo el día con él en casa, y su padre llegaba por la tarde (el niño se ponía como loco cuando le veía entrar), y otras que era su padre el que se quedaba con él en casa y yo llego llegaba a medio día (me ve entrar, me mira y sigue a lo que estaba).
Soy cariñosa con él, muy besucona, juego y pasa tiempo con mi hijo, le hago reir etc.... pero si su padre pasa por nuestro lado, ya me aparta y llora para ire con él, a la inversa nunca me ha pasado, nunca ha llorado por vernirse conmigo.
Siento que no tiene apego a mi, y no entiendo por qué.... practicamos colecho desde que nació, ni uso carrito, le he porteado siempre en mi pecho, he sacado paciencia de dónde no la tenía en los momentos más difíciles, y nada.... no tiene apego a mi. Sólo cuando una cuidadora se quedó con él por una semana, y yo llegaba a medio día, era que notaba su cariño, porque llegaba a casa y se ponía contento...
Puedo poner muchos ejemplos de su predilección paterna. Por ejemplo le estoy bañando (que le encanta) y si ve pasar al padre por el pasillo ya llora para que le bañe él. Estamos pasando el día los tres justos (no echa de menos a ninguno porque llevamos horas los tres juntos) si le cojo yo se revuelve y echa los brazos al padre, sólo quiere que le coja él. Se despierta por la mañana y estoy yo a su lado, acariciandole la mejilla y dándole los buenos días con mucha ternura... me aparta la mano y busca a su padre (que está fuera de la habitación) y llora para que venga. Así multitud de ejemplos.
Su padre no es tan cariñoso como yo, pero también juega con él, el cambia y dá de comer etc.... Si estamos el niño y yo a solas está muy bien conmigo, pero si su padre entra en escena, yo ya no existo. Y esto me entristece profundamente, me siento fracasada como madre y siento que todo esto es muy injusto. Sé que el niño no tiene maldad alguna, y que es completamente inconsciente de su comportamiento, y que aquí la palabra justicia e injusticia no tiene sentido, pero es lo que siento... que es injusto que yo, que he sido la que he sacrificado más no me siento recompensada....Soy la que se ha comido toda la mierda! hablando mal y pronto! y a cambio, sólo recibo rechazo. Yo soy la que pasé 30 horas de parto mientras que su padre bostezaba de aburrimiento, yo soy la que se ha comido casi todas las noches en vela, y los llantos interminables de cólicos, la que ha puesto en peligro su trabajo faltando en multitud de ocasiones porque el niño estaba malo, la que lo ha sacrificado todo ... Sé que mi mayor recompensa es que mi hijo esté feliz y sano, pero necesito saber que me quiere, porque me voy a volver loca.
Hola, lo que has narrado es exactamente lo que me sucedió a mi con mi hijo, no sólo prefería a su papá, me rechazaba constantemente y hasta me agredía, desde que cumplió 6 meses cuando cualquier cosa le molestaba se ponía furioso y se lanzaba contra mi y me agarraba el cabello tirándo tan fuerte que me arrancaba mechones enteros, me metía sus uñas en la cara, era como si me odiara y siendo tan pequeñito me era imposible corregir ese comportamiento agresivo. Sufrí muchísimo con esa situación y a pesar de poner en práctica varias técnicas y consejos profesionales nada parecía cambiar o al menos mejorar un poco.
La buena noticia es que todo cambió conforme fue creciendo. El primer cambio significativo fue cuando a los 18 meses lo llevé a una Guardería o Centro Infantil (no se como lo llamen en tu país). Busqué durante meses un centro que me gustara, visité como 30 lugares diferentes hasta que encontré un lugar nuevo, con pocos niños y donde los niños de su edad tenían 1 cuidadora por cada 2 niños. Sintiéndome confiada lo dejé únicamente por 3 horas al día y fue increíble el cambio. Empezó a mostrarse más cariñoso conmigo, ya no tenía esos ataques de furia, dejó fácilmente el pañal, aprendió a comer de todo, en fin, un logro total.
Al cumplir 3 años pude ver otro cambio grande que resultó ser el más significativo y permanente, fue como si por fin entendiera por completo mi papel de mamá, como si asimilara totalmente por primera vez mis mimos, mis juegos, mi compañia y hasta las reglas y disciplina que ya a esa edad le ponía. De ahí en adelante ha sido el niño más dulce, cariñoso, maduro y bien portado del mundo. Recibo halagos y felicitaciones por él todo el tiempo, a donde quiera que vaya causa admiración por su comportamiento, en el colegio, en la calle, en la casa de mis familiares y amistades, todos concuerdan en que es "todo un caballerito"... Y lo más gratificante es que me adora y me lo demuestra a diario con gestos y con palabras. Ahora tiene 8 años, no tuve más hijos y no podría ser más feliz con mi nene. Así que ánimo!!! Ningún pediatra ni especialista me pudo dar una explicación de su comportamiento de bebé, nunca supe el por qué del desapego hacia mi o el por qué de tanta agresividad, pero ya no importa.