.... Y un mal día tu vida se va al traste, dando de rodillas con una realidad que jamás temiste en la peor de tus pesadillas, porque uno nunca calcula que derrepente se le va a poner el mundo bocaabajo.
... De pronto surge un rebuscar en el recuerdo quien eres .... ¿quien soy? Esa pregunta llevo haciéndomela los ultimos 4 años sin encontrar ninguna respuesta... Imagino que la misma de siempre, la que tenía un tesoro en el bolsillo llamado familia.
... Hay días en los que no soporto vivir dentro de mi misma, días en que quisiera ser cualquier otra persona, sea cual sea su situación... todas menos ésta.
Me gustaría explicarle a alguien lo que me pasa, pero no se cómo voy a hacer algo semejante si ni siquiera cuando me hablo alcanzo a entenderme.
No entiendo demasiado de castigos, pero esta situación es para mi como una condena, una tortura que arrastro en vida en un silencio demasiado duro para llevarlo con una sonrisa en la cara cada mañana que es un día mas que me separa de un pasado en fui quien quiero volver a ser hoy.
Nunca habrá lágrimas suficientes para consolar a un enfermo de TOC, ni palabra que le reconforte, bueno sí: no estás loca....
Quisiera nacer denuevo, volver a cometer los mismos errores, andar los mismos pasos, incluso, quiero volver a confiar en quien me traiciono, amar a quien me ignoro, partirme el alma por cosas que no eran tan importantes. Quiero nacer denuevo y borrar esta enfermedad de mis dias, pedirle a Dios una nueva oportunidad de demostrarme SOBRETODO a mi misma, que soy una buena persona.
Había oído hablar de las famosas recaídas del TOC, y casi creía ser la excepcion que confirma la regla porque me he estado librando de él bastante tiempo, como una superviviente de la mas cruenta guerra, después del huracán del dolor y la angustia.
Anoche sin querer recorri internamente el pasaje del miedo a estar perdida y sin una mano de la que asirme cuando me sumo en ese estado catatonico de desolación.
Algun dia m gustaria descubrir porque me toco vivir este papel, porque a mi, porque...
Tengo 24 años, un trabajo estupendo, una familia increible, unos amigos encantadores, y en este momento lloro tanto, tanto, tanto, me duele tanto el corazón y el alma, que ningún abrazo, ningun estado m consolaria, solo el olvido me haria renacer de estas cenizas en las que de golpe me he vuelto a convertir.
Gracias por leerme, besos.