Tengo varios secretos que condicionan mi vida

 En mi adolescencia me gustaba muchísimo coquetear y me enrollaba con bastantes chicos, como supongo que es normal a esas edades. Esto me ocasionó varios problemas con otras chicas: hubo una, de mi barrio, que con su grupito de amigas me insultaba por la calle y redes sociales (de puta para arriba). Yo las ignoraba y seguía con mi vida, pero ellas no paraban (aunque cuando veía a sus amigas solas, ni me miraban). Un día eran las fiestas de verano y esta chica me escribió un mensaje diciendo que como me viese por la calle, me iba a matar. No hice caso y bajé a las fiestas como si nada. Conocí a un chico, nos fuimos a un callejón, y cuando volvíamos al bullicio... nos las encontramos de cara a mitad de camino. Echaron al chico (que se fue sin más, yo no sé si estaban compinchados o no quería líos o simplemente pensó que eran amigas mías) y empezaron a meterse conmigo, insultándome, empujándome... entonces yo pregunté a la chica, "¿pero qué te he hecho?", y me respondió "es que te miro la cara de guarra que tienes y me das asco"... y acto seguido, me metió un guantazo que casi me arranca la cabeza. Las amigas la sujetaron, y empezaron a decir que dejara que me fuese y tal (¡gracias!). Me fui y a partir de ese momento se olvidaron de mí. 
He tenido varios líos más de este estilo, "chicas que querían pegarme porque sí" (o por algún malentendido con un chico/novio suyo), pero no llegaron a las manos.

 Estaba en un concierto con unos amigos y fui un momento al servicio, sola. Estaba haciendo tiempo en la cola mientras miraba el móvil, en esto que se me acerca un grupo de chicas, muy chonis todas ellas, y una me dice "¿me dejas el móvil?". Yo, inocente de mí, lo único que pensé es que necesitaba hacer una llamada o se había quedado sin datos o que quería verlo (¡já! No tenía sentido pensar esto úl!@#*!, pero lo pensé, así soy), y sin mediar palabra, se lo ofrecí. Lo cogió, se dieron media vuelta y se fueron entre risas... entonces yo dije, "¡oye!", y vino la más grandota, que echándome el humo del cigarro en la cara, muy pegada a mí, me gritó "¿QUÉ?", a lo que yo reculé y dije "nada..." con voz de pringada, y observe impotente como me acababan de robar. Al día siguiente me hice la sorprendida al darme cuenta que había "perdido el móvil" durante la noche. (Lo peor de todo es que un día, en otra fiesta, me crucé con dos chicas y oí perfectamente como una le decía a la otra: "¿esa no fue a la que robó Fulanita?" y empezaron a reirse a carcajadas, pero yo me hice la loca y nadie de mi grupo pareció haber prestado atención al comentario).

 Un día volvía a casa después de una fiesta. Me habían acompañado durante un buen trozo por lo que estaba bastante cerca. Yo iba andando tranquilamente y empiezo a escuchar "¡tsss!, ¡tssss!, ¡eeeehhhh, rubiaaaa!". No le di mayor importancia, puede que no fuese a mí (cosa difícil, porque la calle estaba prácticamente desierta) o tal vez sería el típico que intenta llamar tu atención, pero que si no haces ni caso, termina dejándote en paz. Así que seguí mi camino sin girarme, y ellos (noté varias voces) seguían gritando y diciendo tonterías. En esto que dejo de escucharlos y respiro aliviada... hasta que veo que tengo dos tíos, uno a cada lado. Y empiezan a intentar hacerse los graciosos y simpáticos, a piropearme y a calentarme la cabeza para que vaya con ellos a su casa. Entonces uno me coge de la cintura, yo le aparto las manos e intento salir corriendo... pero me tiran del pelo y me echan hacia atrás. Uno me dijo "cómo me ponen las chicas difíciles". Yo ahí ya me imaginé el peor desenlace, y entre los nervios, el daño que me hicieron y todo, mi reacción fue sentarme en el suelo (lo recuerdo perfectamente, con la cabeza entre las rodillas) y ponerme a llorar. Por suerte, estos tipos se largaron casi al momento, y cuando ya me recuperé un poco, me fui a mi casa.

Todo esto jamás lo he hablado con nadie, son mis mayores secretos. Me moriría de la vergüenza si alguien de mi entorno lo supiese, pero me quema por dentro. Y siento que, aunque hace años que ocurrió, es algo que me ha cambiado para siempre: interioricé un sentimiento de inferioridad, aceptándome como un ser tonto, cobarde, débil,... y poco a poco fui dejando de hacer lo que me gustaba, me volví hogareña, tímida, asustadiza,... especialmente esto úl!@#*!. Si una palabra define mi vida, esa es MIEDO ("¿y si salgo a tomar algo y me dan un navajazo?", "¿y si me voy a caminar por el campo y me violan?", "¿y si cojo el transporte público y se sube un loco con un arma?", y un largo etc.). Lo curioso es que, en esa época, no me afectó en absoluto y yo seguía haciendo mi vida normal sin preocupaciones. Fue con el tiempo que todo esto empezó como a enquistarse en mi interior. Por otra parte, si hoy me viese en alguna de esas situaciones, yo me muero, de verdad (y mira que no fui valiente en ninguna, pero hoy le echaría mucho menos valor, es como que "admiro" a mi yo del pasado... pese a que me comporté como una mindundi, en el presente sería mucho peor).