Como hombre
A ver, soy protagonista de una historia similar. El caso es que ambos estábamos súper excitados, todo iba perfecto y empecé a sentir ganas de hacer pis, había tomado unas cuantas cervezas, estábamos tan a gusto, la tenía como Dios la trajo al mundo sentada en mis piernas, y no quise ir al váter dije, ya iré después (pensé), el caso es que cuando me empezó a desvestir las ganas de hacer pis aumentaron, sentía que iba a reventar y disminuyo mi erección...
Aunque fui al servicio y pude hacer pis, la presión psicológica sobre mi era muy alta a eso le sumamos que estábamos en una terraza con edificios al los alrededores y su hermana estaba durmiendo a medias a pocos metros que no logré e rectarme a plenitud de nuevo. Cada minuto que pasaba era peor, claro, intenté satisfacerla de otras maneras pero me sentía fatal.
Una disfunción femenina dependiendo del caso puede solucionarse de varias maneras o por lo menos intentarlo pero en el hombre... que mal lo tenemos.
Su actitud no pudo ser mejor, nunca se dio por vencida y en ningún caso me rechazo.
Te cuento mi historia con dos intenciones, la primera contarte mi experiencia y de alguna manera desahogarme y la segunda el que veas que nosotros también la pasamos mal.
De verdad me siento terrible aunque trato de convencerme que estaba bajo presión pero es igual siento que no he cumplido con la misión de satisfacerle al máximo y de haber disfrutado de una mujer espectacular en un acto sexual que debería haber sido exquisito.
Me pregunto cómo os sentís en el fondo? Creéis que somos inficiónales o todo depende de quienes representemos para vosotras.