Tengo un hijo de 8 años que ha sido siempre muy sentimental y muy poco agresivo. Pero últimamente reacciona con mal humor muy a menudo. Cuando tiene alguna frustración arruga el ceño exageradamente, aprieta los puños y a veces hasta gruñe, y eso puede durarle muchos minutos. Y si intentas hablar con él se enfada aun más y lo mismo hasta trata de empujarte para sacarte de la habitación.
Muchas veces, el origen de esos enojos está en alguna discusión con su hermanita de 4 años o en la intervención de alguno de sus padres en la discusión, normalmente para regañarle a él. Pero otras veces son reacciones exageradas a pequeñas frustraciones normales, y cuando esto sucede delante de otras personas, nos hace pasar vergüenza y desconcierto, por no saber cómo abordar la situación.
¿Cómo enfrentarse a un momento de furia a corto plazo?
¿Y cómo tratar el problema a largo plazo?
Gracias.