Hola, me siento sola y triste, llevo des de los 14 años con depresión y tengo 32.
Todo empezó a los 13 cuando en clase en EGB me llamaban marimacho, fue porque pegué a un niño por tocarme el culo y éste empezó a llamarme marimacho, desde entonces empecé a vestirme mal, a estar triste y es que esta palabra me afectaba mucho, no lo hablaba con nadie, ni con mis padres, pero me sentía fatal. Al llegar al instituto, me relacionaba poco con la gente, me sentía con muy baja autoestima y encima empecé a pensar que igual era lesbiana, le daba vueltas y para mí no podía haber nada peor que ser homosexual, digamos que tenía homofóbia interiorizada, era tan fuerte mi rechazo a serlo que pensaba que antes de serlo prefería el suicidio, tenía una mala imagen de las lesbianas, las veía marimachos, con baja autoestima, muy machorras y para nada quería ser así. El caso es que cambié de instituto y no hice ningún amigo en los 2 años que estuve en él, no miraba a la gente, bueno primero no miraba a las chicas para que no pensaran que podía ser lesbiana, luego dejé de mirar a los chicos para no levantar sospechas y de esta manera no sabía ni quien tenía detrás en clase. Lo pasé muy mal. Sobretodo a la hora de gimnasia que nos cambiábamos juntas todas las chicas en el mismo vestuario y yo me negaba a mirar a ninguna, lo evitaba por todas las maneras... así pasaron los dos años hasta que fui a la universidad a los 18, en esta época conocí a un chico que era 14 años mayor que yo y me seguía mucho por todas partes, a mi me hacía cierta gracia sobretodo porque le veía ramalazo, pluma y era muy gracioso, cada fin de semana mi padre me decía a ver si te espabilas y te vas de fiesta y nos dejas en paz, y como cada finde era lo mismo me acerqué más a este chico, empezamos a salir y no porque me gustara, ya he dicho que lo encontraba demasiado afeminado, sinó para poder salir de casa más a menudo y no tener que aguantar las broncas y malas caras de mi padre.
El caso es que seguía todo este tiempo con la obsesión de ser lesbiana y saliendo con este chico que no me gustaba lo que hacía era agrandar más el problema porque por obsesión a no ser lesbiana quería estar enamorada de él, y me forzaba mentalmente a sentir algo por él, esta obsesión duró un año, cada día me obligaba a estar enamorada de él, sé que parece una tontería visto ahora, pero es que la obsesión era muy fuerte, y tanta obsesión y tanto forzar mis pensamientos y sentimientos durante un año entero acabaron conmigo. Acabé siendo un vegetal pensante, nada del exterior me ofrecía nada, no me fijaba en nada, los pensamientos eran muy fuertes y muy seguidos tanto que no sabía ni lo que estaba pensando en un momento determinado.
Ahora ya no sé quien soy, no tengo amigos y estoy apática. Sigo sin tener clara mi orientación sexual y no sé qué hacer con mi vida.
Muchas grácias por leerme, estoy abierta a cualquier comentario.