En respuesta a amaray_8424944
No soy madre
No soy madre, pero en vez de pegarle o castigarle, porque eso ara que se vuelva mas en contra de ella. Tienes que favorecer a tu mujer delante de la niña decirle a ella que comparta juegos, es muy importante que tu no estes delante claro. Y sobretodo reñirle tu si es que ella pega a su madre.
Completamente deacuerdo
eso si nada de golpes de ninguno de los dos, en realidad es lo que pasa a los hijos con el papa, solo que a papa no le importa si su hijo siente celos de el, mi hijo no quería que su papa se me acercara, y me favorecía a mi, a mi esposo eso no le deprimía pues es lo mas normal, pero si pasa al revés pues la mama se angustia. Para mi hay 4 tipos de hogares (aunque debe haber muchas excepciones y casos especiales): uno en el que mama y papa ponen autoridad (donde yo creo que los hijos crecen demasiado oprimidos), otro en el que mama es la autoridad y papa el que consiente a los hijos (de manera medida es muy sano, pues papa es el cómplice de los niños y ellos pueden tener a alguien que los consuele y que les deje salirse con la suya de vez en cuando), el otro es al revés cuando mama consiente y es cómplice de sus hijos y papa es el autoritario (lo que separa a papa de los hijos) y el ultimo en el que no hay autoridad alguna (esto no se debe hacer pues el niño crece sin ningún limite). Creo que tu caso es el tercero aunque el hecho que te hayas quedado con tu hija ha invertido los papeles, has creado un lazo especial con tu hija como si fueras la madre y tu esposa por el contrario ha ido alejándose de ella. En el caso de que un papa trabaje fuera todo el día cuando llegue a casa no se va a poner a gritar y a poner disciplina en sus hijos, tiene que ser el padre amoroso que aproveche cada minuto para darle a sus hijos lo que no puede darle todo el día, igual si es la mama la que trabaja, la persona que cuida al niño o niña, o que pase mas tiempo con ella es la que debe poner la disciplina. Te recomendaría que tu esposa se convierta en cómplice de su hija, que salgan las dos juntas, que busquen actividades de mujeres en donde tu no debes participar, hasta que reconstruyan su relación, y ya después que se ponga a disciplinar a su hija, mientras tanto debes asumir tu ese rol aunque no sea agradable.