En respuesta a joerg_6212588
Hola a tod@s
Vereis, mi madre, de 70 años, tiene reuma y artrosis. Unos achaques más o menos normales en lo que puede ser una persona de su edad. Hace 15 años se cayó por unas escaleras y desde entonces arrastraba problemas en una pierna, concretamente en la rodilla izquierda. Lo fue sobrellevando hasta que hace unos 5 años al andar le dolía mucho la pierna mencionada. Hace año y medio la operaron, extirpándole los ligamentos de la rodilla. Fue un éxito y según los médicos, con la oportuna rehabilitación podría volver a caminar, siempre teniendo en cuenta esos pequeños achaques mencionados al principio.
El problema es que desde que se operó(Noviembre 09) hasta el día de hoy, vive encerrada en casa. Acudió a una sóla sesión de rehabilitación, no abandonó su muleta/andador, no empezó a dar suaves paseos, nada de nada. Desde entonces, no quiere salir de casa. Sólo lo hace si es estrictamente necesario, como por ejemplo, un incendio que tuvimos en el edificio hace dos meses, y lo hace, usando una muleta en una mano, y en la otra, apoyandose en otra persona. Es totalmente incapaz de dar un paso sin estar agarrada a algo. En casa se va agarrando por muebles, paredes, etc.. amén del andador y la muleta. Cuando le preguntamos si es que le duele la rodilla, nos dice que no le duele, pero que no puede ponerse ergida sola, que se cae. Si le instamos a que realice un esfuerzo, grita y nos pide que la dejemos en paz.
Lo que me ha motivado escribiros, precisamente hoy, ha sido lo siguiente: En mi pueblo estamos de fiestas, y mi hermano la ha sugerido ir al recinto ferial, pues hace 6 o 7 años que no acude. Ella ha aceptado, aunque ha puesto un montón de trabas. Un taxi la ha recogido en la puerta de casa y la ha dejado en la portada de la feria, y a la vuelta igual. Al bajar del vehículo y comenzar a caminar, con el andador por supuesto, iba en todo momento en tensión, muy concentrada, mirando al suelo, viendo donde ponía el andador y colocaba el pie para avanzar. Cuando llevaba avanzado unos 30 metros ha dicho que no podía seguir, y hemos tenido que volvernos a casa. Lo que intentaba ser un rato de entretenimiento y cena en familia ha quedado en caras largas, frustación, y tristeza, de ver como mi madre no pone de su parte...
Cuando le decimos que creemos que su problema debe ser visto por un psicologo nos bendice en arameo, y cree que nos tomamos a broma sus "males". Cree incluso, que estamos contra ella, cuando lo único que queremos es que vuelva a ser una persona independiente que pueda salir y desenvolverse por sí misma.
Agradecería cualquier consejo, esta semana próxima sin falta voy a pedir cita con el psicologo del centro de salud, pero no sé si querrá acudir.. como hay que salir a la calle y andar...
Muchas gracias a todos. Alex
Hola
Pienso que en esta situación están las dos caras de la moneda
por un lado ustedes que quieren ayudarla e incluso que se divierta y por el otro
ella y los miedos que tiene.
La situación seguramente también le produce insatisfacción, frustración, impotencia y
además la inseguridad.
Lo mejor que pueden hacer es que ella vaya a un psicólogo para que le ayude a
manejar y controlar sus miedos y a sentirse nuevamente segura e independiente.
Te comparto un enlace
