En cuánto a tu timidez: eso sólo es cuestión de voluntad, puedes hablar, relacionarte y expresarte. Respeta a los demás y hazte respetar, esto último es muy importante. Aprende a elegir qué personas valen la pena su amistad y cuáles no. No importa la confianza que tengas con alguien, no le cuentes nunca tus secretos, tu mejor amiga(o) hoy puede ser tu peor enemiga(o) mañana.
En cuánto a la muerte: todo lo físico, ya sea una flor, una mariposa, una persona o una estrella, tiene un tiempo de existencia, luego "muere" para transformarse en otra cosa. No te preocupes por cosas que no puedes controlar.
Te contaré un cuento que a mí me sirvió mucho en su momento:
Era un hombre que había visto cómo la muerte muchas veces llega en forma repentina sin importar de qué persona se trate. Para que a él no lo sorprendiera decidió pensar siempre en ella: "ahora que aborde el ascensor se va a romper el cable y moriré", "ahora que estoy manejando voy a tener un accidente y moriré", "cuando me esté bañando resbalaré y moriré", etc, etc. Así se pasó muchos años de su vida, siempre pensando en la muerte. Un día mientras caminaba por un parque algo lo distrajo de sus recurrentes pensamientos, tal vez fue el vuelo de una mariposa, la risa de un niño o el perfume de una flor. Justo en ese momento de distracción la muerte aprovecha y le clava su guadaña (un infarto, un accidente, etc). Mientras agonizaba pensaba, no en la muerte que venía sino en toda la vida que había perdido pensando en ella.
Bien chica, espero que todo lo anterior te ayude a empezar una nueva forma de ver la vida. Una cosa es vivir la vida (siempre con responsabilidad) y otra cosa es dejar que la vida te viva. Ojalá pronto podamos saber qué camino elegiste.