Nunca pensé que me encontraría en esta situación y por eso no sé qué hacer. He estado con un chico un año y pico. Lo nuestro siempre ha sido una relación difícil, con altibajos. No es que discutamos mucho, pero cuando lo hacemos yo encuentro el motivo suficiente grave como para romper. Os explico por qué.
Él dice que no es celoso, pero es muy inseguro. Al principio de nuestra relación, llegó a decirme que me había visto en compañía de otros chicos y por mucho que le prometiera que debía ser otra parecida a mí porque yo estaba en otro lugar en ese momento, creo que nunca ha llegado a creérselo.
Si me ve mal o discutimos por alguna tontería, se obsesiona con hacer las paces enseguida. Yo necesito tiempo, pensar las cosas para luego estar bien y seguir adelante. Pero él insiste hasta tal punto de venir a mi casa y llamar varias veces hasta que consigue entrar. Si hablamos y aún así estoy mal, le pido que se vaya y me deje sola, y él se queda sentado en el sofá hasta que me saca de quicio y tengo que echarle de mala manera de mi casa, con lo que me quedo hecha polvo. Y esto cada dos por tres.
Lo justifica diciendo que se pone muy nervioso porque me quiere mucho y no soporta discutir conmigo, pero no respeta que yo a veces necesito tiempo, o estar sola, o simplemente que alguna noche no venga a casa para poder hacer mis cosas. No lo entiende porque, según él, pasaría cada segundo conmigo y sólo está bien a mi lado. No entiende por qué necesito ese tiempo para mí. Si me dice que lo acepta, la siguiente vez que le expreso esa necesidad es volver a empezar: llamadas, "te echo de menos", "te quiero mucho", "no soporto estar sin ti", etc. etc.
La última ha traspasado el límite. Al volver de vacaciones, yo me sentí cansada unos días y algo triste, no sé por qué, simplemente fue así. Él insistió para saber qué me pasaba y se lo dije, me sentía mal sin motivo y quizás necesitaba tiempo para estar sola, una noche al menos. De nuevo, ni lo entendió ni lo respetó. Estando yo trabajando, me llamó cuatro veces al móvil. No se lo cogí porque estaba en una reunión y le he dicho mil veces que no hace falta que me haga tantas llamadas. Que con una basta. Que yo la veo en el móvil y le devuelvo la llamada en cuanto pueda.
Él, pensando que no quería hablar con él, fue a mi trabajo, entró y preguntó en recepción si estaba. Me llamaron pero, lógicamente, no me encontraron. Él dijo que no quería dejar ningún mensaje pero no quiero imaginarme el tono ni la cara que tenía para que la recepcionista subiera a buscarme a mi sitio. Cuando me lo dijeron me moría de vergüenza.
No es la primera vez que va a mi trabajo y me llama para que baje, pero le digo que allí yo voy a trabajar, no a solucionar mis problemas amorosos. Que ya hablaremos tranquilamente en otro momento. Nada, como si oyera llover. Que si está fatal, que si tiene muchos problemas y por eso está tan nervioso....que si debería ser más comprensiva...
Le he dicho que con esta se ha pasado. Que ya no puedo más. Que no atiende a razones, que va a la suya y no respeta nada. Que no piensa en mí aunque diga que no hace otra cosa, porque el estado de nerviosismo en el que me pone cuando hace algo así es increible, no me había visto a mí misma así jamás.
Le he dicho que ha perdido mi confianza y que me dan miedo sus reacciones, el hecho de que ni piense ni razone cuando está así. Él me dice que sólo está así cuando me ve mal, que es porque me quiere, pero ya no me vale. Estoy intentando dejarle porque con todo esto he perdido mis sentimientos por el camino y ya no siento lo mismo. Pero él dice que es porque estoy enfadada. Aún así, sigue viniendo a mi casa aunque le he dicho que no lo haga. Ya es que ni le abro la puerta y le digo que se vaya.
Quizás no sea tan grave, pero yo estoy nerviosísima. No sé si estoy enfadada, nerviosa, o qué. Pero el caso es que no puedo seguir así. Tengo razones para acabar la relación? O es verdad lo que él dice y sólo lo digo porque estoy enfadada?