Nueva en la oficina

LLevo 13 años en una empresa, y por motivos familiares me he tenido que trasladar a otra oficina diferente dentro de la misma empresa, ya que tiene varias sedes en el país. El caso es que llevo 5 meses aquí y estoy empezando a sentirme con ansiedad, incluso algunas mañanas estoy empezando a notar que no quiero levantarme y que no quiero ir a la oficina.

Lo que ocurre es lo típico, llegas nuevo a algún sitio y todos los compañeros ya tienen su vida, sus grupos o pandillas ya formados, y no tienes con quien hablar...eso es lo que me está ocurriendo, pero lo que me preocupa es que no me puedo creer que a mi, con 32 años, me esté afectando algo así, cuando esa situación es más normal que le afecte a alguien con 15 años o así, en el instituto...etc, pero no a una persona adulta.
 
Pues sí, me está afectando, incluso cuando llego a mi casa no puedo dejar de pensar en ello, como si fuera una obsesión. 

Comprendo que yo soy una desconocida para ellos, pero incluso hay una compañera que NO ME ACEPTA, literalmente, no acepta mi llegada, me pone caras raras, incluso cuando he intentado romper el hielo con ella, me responde mal si algo le pregunto, o algo le digo. NO VUELVO A DIRIGIRME A ELLA. Ofrece pasteles a todos los demás, va por sus mesas con la bandeja...a mi NO, y me tiene a escasos metros.

La jefa de la oficina, es muy habladora, pero con el resto, claro, que a mi no me sostiene ni el contacto visual, si en algo rompo el hielo con ella, me responde pero me da la espalda, es decir, hablo con su espalda o nuca...qué desagradable y qué mal me hace sentir eso.

Mi compañera de al lado, el otro día malinterpretó un comentario mío, y no sólo eso si no que se lo contó al resto de compañeros.  La culpa es mía, trato de romper el hielo y me sale mal el intento, porque no me conocen y no saben.... Sé que se lo contó a lo demás porque he tenido que aguantar alguna indirecta entre risas....como si yo fuera tonta que no me doy cuenta.

Luego se levantan al café, o a comer, y a mi nadie me dice nada, me levanto y voy detrás de ellos como si estuviera mendigando algo de atención.

Esto ha empezado a afectar a mi rendimiento laboral, incluso a veces no puedo comer pues se me ha quitado el hambre, he empezado a pensar en volver a mi lugar de origen...no quiero que esta situación pueda conmigo, lo fácil es tirar la toalla y rendirme, pero no tengo fuerzas.

Agradecería vuestros consejos.
Gracias a todos